Riera reivindica con guante blanco; Puig responde con 'ximoanuncios' en turismo e innovación

ALICANTE. La Noche de la Economía Alicantina, dos años después de su última edición por la pandemia de 2020, volvió a ser lo que solía. Al menos, en sus últimas ediciones. Con los empresarios que han superado la crisis sanitaria y los seis premiados (más Juan Perán, medalla de la institución) como auténticos protagonistas, el presidente de la Cámara, Juan Riera, interpretó su papel 'leyendo la cartilla' en tono amable al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que intervino en último lugar para admitir la mayoría de los reproches y hacer propósito de enmienda. Con batería de 'ximoanuncios' incluida.

La enrarecida 'batalla' por la presidencia que daba por inaugurada a mediodía, vía comunicado, el vicepresidente de la Cámara Carlos Baño (y que obligó a Riera a responderle indirectamente en su discurso de la 'noche grande' de la Cámara) sobrevoló la gala, que no obstante permitió ver cumplidas tres aspiraciones: la primera, volver a celebrarse; la segunda, homenajear la labor de los empresarios alicantinos, más allá de los galardonados; y la tercera, que Riera volviese a sacar su 'guante blanco' para centrar las tres grandes cuestiones que la provincia necesita ver resueltas, y que Puig se mostrase igual de receptivo que en 2019, aunque mucho más concreto.

En este sentido, Riera puso sobre la mesa como grandes cuestiones, dentro de un discurso en clave positiva, la exigencia de defender el trasvase Tajo-Segura frente a la "insolidaridad" de la región vecina, la inconveniencia de aplicar una tasa turística a un sector ya muy castigado, y la necesidad de seguir descentralizando la Comunitat para que Alicante encuentre un mejor encaje. Y a cambio, tendió la mano de la Cámara para otras dos: coordinar y ser interlocutor de la estrategia de digitalización de la provincia, y servir de canal para que los fondos europeos lleguen a las pymes gracias a su capilaridad.

Puig, que cerró el acto con elogios al papel de los empresarios durante la crisis ("hacen falta más empresarios, la empresa es el único camino hacia la prosperidad", aseveró), recogió el guante. Para comenzar, admitió que los Presupuestos Generales del Estado son "insuficientes" para la provincia y se comprometió a compensarlo con los de la Generalitat: el 50% de los fondos europeos para transporte, el 40% de la inversión directa en 2022 y un plan de infraestructuras específico con 70 millones, que incluye impulsar la conexión Alicante-aeropuerto aunque no sea competencia autonómica.

Plataforma Inteligente de Turismo en Benidorm

En cuanto a la descentralización, recordó que se han dado pasos con la Conselleria de Innovación en Alicante, la Dirección de Turismo en Benidorm, la Agencia del Territorio en Elche y el IVAM en Alcoy, y como "no es suficiente", aseguró que seguirá dando pasos para ello. En cuanto a la descentralización de España, anunció que ha pedido a la ministra que "Benidorm albergue la Plataforma Inteligente de Destinos Turísticos, para la que se prevé destinar una inversión de 130 millones de euros". También se comprometió a corregir el desequilibrio en empleados públicos en la provincia, con un déficit de 4.500 empleados autonómicos.

¿Tasa turística? De nuevo, dio la razón a Riera. "No es el momento de debates estériles. La Generalitat va a facilitar sin obstáculos la actividad de un sector que ya aporta a la caja común más de lo que recibe", aseguró. Puig tildó de "miopía" los ataques al sector, que "encarna el futuro que buscamos, más sostenible y digital". ¿Agua? "El Consell ha ido 40 veces a los tribunales a defender el Tajo-Segura, irrenunciable, mientras buscamos una solución duradera, con la mano tendida pero firme". 

Por último, en cuanto a su apuesta por la innovación, Puig anunció que el puerto de Alicante y Elche acogerán sendas plataformas de vehículos autónomos dentro del PERTE, y que el puerto de Alicante además contará el año que viene con un cable submarino para conexión de datos de alta velocidad, "gracias a la iniciativa privada". Una infraestructura que conectará la provincia y le abre las puertas para acoger centros de datos. Como último propósito de enmienda antes de despedir el acto citando palabras de Perán, Puig se comprometió también a "desburocratizarnos".

Los premiados: Perán pone en pie al auditorio

Antes de los discursos institucionales, los protagonistas del acto fueron los premiados. El fundador de Clave Denia (Ale-Hop), Vicente Grimalt, recogió el Premio a la Trayectoria Empresarial; el cofundador y director ejecutivo de Realturf, Juan Antonio Rodríguez, recogió el Premio a la Internacionalización; el gerente de Terra Natura, Luis Perea, recogió el Premio al Turismo; el fundador de Kuo's Professional, Juan Antonio Sanchis, recogió el Premio a la Industria; el gerente de Madagascar Mascotas, Álvaro Esclapez, recogió el Premio al Comercio; y la directora de Marketing de Instituto Bernabeu, Sòmnica Bernabeu, el Premio a la Innovación.

Llegó después el turno de Juan Perán, fundador de Pikolinos, que recibió la medalla de oro y diamantes de la Cámara como premio a su trayectoria, y que con su sola presencia sobre el escenario (acompañado de su esposa, Rosario Bazán, y sus tres hijos y sucesores al frente de la empresa, Juan Manuel, Rosana y Carolina) logró lo que ningún galardonado en los últimos años: poner de pie a todo el auditorio, que a lo largo de su intervención intercaló las carcajadas tras cada anécdota con los sonoros (y prolongados aplausos), en reconocimiento a su trayectoria. "Gracias a la vida, que me ha dado tanto", entonó para despedirse, tras una larga lista de agradecimientos comenzando por todos sus trabajadores y su familia.

Archembau, los fondos y la burocracia

Como anfitrión, una vez más, ejerció Christian Archembau (que la Noche de la Economía se celebre en el auditorio de la Euipo es ya una tradición), que también se ganó su ración de aplausos espontáneos de los empresarios cuando, sin perder nunca el tono afable y tirando de ironía, criticó los tiempos de la administración para aprobar cualquier inversión. Una advertencia sobre la capacidad de España para aprovechar los fondos europeos "si no se reforman inmediatamente los reglamentos que dificultan la inversión y se pone la administración al servicio de las empresas, y no al revés". Archembau ejemplificó esta problemática con el caso de la Euipo: "Adquirimos una parcela y parte de una calle en 2018 para ampliar nuestro campus, y dos años después no hemos conseguido aprobar el proyecto; hemos recopilado 13 informes de 13 organismos diferentes, y creo que estamos al 95% de tramitación".