EL CAMPELLO. El vertedero 'Les Canyades', ubicado en El Campello, vuelve a generar desentendimiento entre el Consorcio MARE y los vecinos afectados. En esta ocasión se ha producido debido a la restricción de entrada a ciertas áreas solicitadas por el colectivo vecinal, zonas concretas a las que, según el Consorcio, "por motivos de seguridad de las personas no se puede acceder andando". Una historia con dos puntos de vista distintos que ha acabado por suspender la visita prevista de los vecinos a la planta.
Consorcio Mare
Según ha explicado el Consorcio MARE en un comunicado, la visita preparada, "completa y de carácter técnico", se ha cancelado al haberse "negado" los vecinos, "dirigidos por Esquerra Unida - Unides Podem", quedándose sin conocer "las mejoras" y sin resolver "las dudas al respecto". Explican que, se han realizado dos grupos de visita "al haber asistido más personas de las que estaban previamente inscritas, a las que se les ha dejado igualmente entrar en las instalaciones, también para facilitar la explicación técnica y la comprensión de todos los procesos".
Una vez en la planta, los responsables vecinales y el concejal de Esquerra Unida "han solicitado acceder al interior de las instalaciones y a zonas concretas a las que, por motivos de seguridad de las personas, no se puede acceder andando, como el depósito de lixiviados", han expuesto desde el Consorcio. Según los responsables de la visita, "se ha informado a los vecinos que desde la nueva pasarela de visitas se contemplan directamente todos los procesos con seguridad y que, aquellos puntos que no se pueden contemplar desde los diversos observatorios, como los biofiltros o el depósito de lixiviados, se pueden visualizar con cámaras en tiempo real para ver cómo están funcionando, pero los vecinos se han negado ni siquiera a entrar en la planta".
Desde el Consorcio se muestran "sorprendidos" y "apenados" por la "actitud" del concejal de Esquerra Unida y un "supuesto" técnico que ha acompañado a los vecinos, "que se ha dedicado a insultar desde el minuto cero, a increpar a diversos trabajadores del Consorcio y se ha negado a realizar la visita que estaba prevista", han trasladado. "En lugar de querer ver las instalaciones, se ha demostrado claramente que lo que querían era reventar la visita para luego dar una versión falsa de lo sucedido", han manifestado los responsables de la visita vecinal.
Sobre la presencia del presidente del Consorcio MARE, José Ramón González de Zárate, aseguran que "sí ha asistido", al igual que el alcalde de El Campello, Juanjo Berenguer. Dos figuras que "habían propuesto sentarse para escuchar sus reivindicaciones y aclararles todas sus dudas, pero cuando ha llegado el presidente, los vecinos ya se habían ido, al negarse a realizar la visita y a las soluciones que se les han planteado para resolver sus dudas sobre la planta".
Asociación vecinal
Por su parte, se han desplazado hasta las instalaciones la asociación de afectados por el vertedero 'Les Canyades', la Asociación Vecinal Campellera (AVC), Ecoxarxa, Esquerra Unida - Unides Podem y Ecologistas en Acción. Cuentan que el 19 de abril se solicitó una visita a la planta, aceptándola el Consorcio y proponiendo el lunes 20 de mayo para llevar a cabo la misma. "Nos dijeron que seríamos recibidos por el presidente del Consorcio, el cual no ha asistido". Y niegan haber acudido más de 20 componentes.
"Nuestra sorpresa ha venido cuando, previo al inicio del recorrido, se nos ha denegado la entrada a zonas potencialmente generadoras de los problemas de olores y químicos como son la nave de compostaje manual, los biofiltros, la caldera de biomasa, la planta de biometanización y la balsa de lixiviados". Por ello, sostienen "no haber podido conocer y valorar las anunciadas mejoras de reducción de la contaminación. Lamentablemente, después de quince años desde que comenzó esta pesadilla para tantas familias siguen actuando con la misma falta de transparencia de siempre. Mientras tanto, aprueban un nuevo vertedero de 10 metros de altura encima del actual, que ya estaba colmatado. Nuestra tortura continúa y su opacidad también", han sentenciado.