Pudo ganar cualquiera y ganó el aficionado

17/11/2024 - 

ALICANTE. Además del pesar y solidaridad hacia las víctimas de la Dana, el empate entre el Levante y el Elche del sábado estuvo presidido por el balón... y además para bien.

Sí, el fútbol es un juego de pelota, pero en ocasiones los contendientes disputan los partidos de espaldas al mismo. Fiel a su estilo, el equipo de Eder Sarabia no lo hizo en el primer tiempo y el de Julián Calero dejó de hacerlo en el segundo, encontrando ambos premio a lo anterior en la forma de goles. Con lo anterior, dos rivales directos en la lucha por el ascenso le regalaron a los 19.000 aficionados que se dieron cita en Orriols un buen partido con el que evadirse de la tragedia que ha tocado de cerca a muchos de ellos.

Aunque esta vez el encuentro no acabó en victoria franjiverde, Agustín 'El Canario' Álvarez volvió a marcar de cabeza en un envite a domicilio, en esta ocasión no con Álvaro Núñez y sí con 'Nico' Fernández como asistente. El mediapunta argentino fue el mejor del Elche en el Ciutat de Valencia por lo anterior y porque, entre otras cosas, tuvo en sus botas el segundo gol de los suyos (bien en primera persona, bien a través de Mario Gaspar), pero Andrés Fernández se lo negó.

El problema es que el adversario (con su entrenador a la cabeza) también juega y las variaciones (de jugadores y de esquema) que ordenó Calero poco después de rebasar la hora de partido le dieron la necesaria marcha más a su equipo que no encontró el Elche con los suyos: en las filas franjiverdes había jugadores muy justos de fuerzas como Raúl 'Guti' (titular como franjiverde 285 días después) o Josan, quienes aguantaron 60 minutos a duras penas, llegando su relevo (y el de 'El Canario') en un triple cambio que prácticamente precedió al gol del empate del Levante. Un tanto en el que brillaron con luz propia Carlos Álvarez y Brugué, quien había saltado en el minuto 63 junto a Diego Pampín y Carlos Espí en el marco de la citada triple variación 'grogueta'.

Teniendo en cuenta que pudo ganar cualquiera (al igual que su homólogo en la meta contraria, Dituro también tuvo intervenciones decisivas a lo largo de la tarde), el empate se puede considerar justo.

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