BARCELONA (EFE). David Jiménez (Madrid, 1974) es el presidente de ProLiga, una comisión que agrupa a más de 240 clubes de Segunda División B y Tercera, y ahora mismo tiene como máxima preocupación el hecho de que el Consejo Superior de Deportes (CSD) haya informado, según él, que no abonará a los clubes de Segunda B la totalidad de las ayudas pactadas para pagar la Seguridad Social.
Así lo explica Jiménez quién también apunta que a día de hoy ningún club les ha comunicado que esté en peligro de desaparición. Pero, en cambio, han sido varios, sobre todo de Segunda B, los que les han expresado su temor a sufrir graves problemas de viabilidad económica como consecuencia de las restricciones sanitarias y de tener que hacer frente a pagos imprevistos a la Seguridad Social.
- Pregunta: ¿Cómo está funcionando el programa COnVIvienDo de la RFEF para que se hagan test antígenos semanales a los jugadores?
- Respuesta: Lo primero que quiero dejar claro es que desde ProLiga tenemos una máxima que es la salud de las personas y, en este sentido, estamos a favor de que se tomen las medidas sanitarias oportunas para que los miembros de los equipos estén protegidos. Pero nos preocupa el hecho de modificar las reglas del juego una vez la temporada ya ha empezado. Los clubes hicieron sus presupuestos sin tener en cuenta estos gastos.
- P: ¿La RFEF entrega los test antígenos a los clubes de forma gratuita?
- R: Sí, pero todos los gastos relacionados con estos test corren a cargo de los clubes. La RFEF no asume ni la logística ni los costes que suponen la realización del propio análisis, ni tampoco su comprobación en el laboratorio. Cada club está haciendo lo que puede y los test se deben hacer con responsabilidad, bien hechos. Por ejemplo, puede que el encargado de hacer los test en algunos clubes no sea la persona adecuada.
- P: ¿Cuánto suponen para los clubes estos gastos derivados de los test?
- R: De promedio unos 1.200 euros al mes por equipo.
- P: ¿Los clubes podrán hacer frente a estos gastos durante todo el curso si la situación se alarga?
- R: El problema es que esto se añade a la falta de ingresos que los clubes de algunas comunidades autónomas siguen sufriendo por no poder tener público en los campos. En este sentido no hay un alineamiento a nivel nacional. Y no tener público, dejando de lado la pérdida de ingresos por taquillaje, comporta que la gente no se haga socia del club porque no hay partidos, que los patrocinadores no pongan vallas publicitarias porque nadie reparará en ellas y que los bares y las cafeterías de los campos de fútbol tampoco facturen.
- P: ¿Hasta qué punto es preocupante la situación?
- R: Entre otras cosas, nos preocupa el hecho de que al principio de temporada algunos clubes no fueran conscientes de que si la situación se alargaba mucho podrían acabar teniendo serios problemas para afrontar pagos.
- P: ProLiga tiene más de 240 clubes asociados. ¿Algunos de ellos podrían desaparecer si se alarga mucho la pandemia del coronavirus?
- R: Hasta ahora ningún club nos ha informado de que esté en peligro de desaparición, pero sí nos han hecho llegar situaciones de peligro de viabilidad económica. Especialmente los clubes de Segunda División B, que están muy preocupados porque el CSD informó recientemente que no les abonará todo el dinero pactado de las ayudas para pagar la Seguridad Social.
- P: ¿Cuál será el impacto de esta decisión?
- R: Por este asunto hasta se han puesto en contacto con ProLiga clubes de Segunda B que no están asociados a nosotros. Los clubes van a hacer sus alegaciones. El impacto sería muy fuerte. Estas ayudas se deben desde enero de 2019 y eso ha provocado que algunos clubes ya se hayan gastado el dinero contando con que llegaría la totalidad de lo pactado con el CSD. Hasta puede ser que algunos pidieran préstamos que pensaban devolver con el importe de esta ayuda. ¿Qué harán ahora? Ahora este asunto es totalmente prioritario para ProLiga.
- P: Hace unas semanas salieron las resoluciones de las ayudas del programa Impulso 23 de la RFEF, que destinará 29 millones de euros entre los clubes de Segunda B y Tercera. ¿Serán suficientes?
- R: No, empezando porque las cantidades son menores que las de la temporada pasada. El motivo que da la RFEF es que este curso será más corto que el anterior, pero nosotros queremos recordar que los meses de competición serán los mismos. Además, no sabemos el criterio que se ha seguido para hacer el reparto.
- P: ¿Cómo está ahora la relación con la RFEF después de que ProLiga denunciara que se le había excluido de forma arbitraria de la última Asamblea General?
- R: Hay diálogo. Cuando ProLiga se queja a la RFEF no lo hace para molestar a nadie por gusto, sino buscando el bien del conjunto de los clubes.