ELCHE. Cada persona establece su baremo de exigencia más o menos alto. Por lo que noto en el entorno, buena parte califica la primera vuelta del Elche con un "bien" o "suficiente". Yo le doy más valor y llego hasta el "notable". Si tuviera que poner una cifra, sería un 7,5. Por encima de la media de las valoraciones que percibo.
Pongamos el contexto: tras 21 jornadas, el equipo ilicitano ocupa el 13º puesto con 24 puntos. Tiene una ventaja de tres sobre la zona de descenso. Condición de recién ascendido, con el segundo presupuesto más bajo de Segunda y una plantilla con la mitad de los integrantes y el entrenador con nula o escasa experiencia en el fútbol profesional. Y con, esto ya es interpretable por cada uno, la sensación de que ha obtenido menos premio del merecido. No sólo lo digo yo, también varios técnicos de Segunda.
Aunque también hay que mirar lo negativo: falta de gol, sobre todo en algunas fases, goleadas recibidas, hubo que esperar al noveno intento para el primer triunfo a domicilio, falta de reacción de Pacheta en algunos partidos, la 'Sorydependencia' en el comienzo de Liga… y podríamos seguir. A pesar de todo ello, alcanza el ecuador dentro del objetivo vital. No llega a una media de 50 puntos, la cifra calificada como seguro de permanencia, pero puede que no necesite sumarla.
Y tampoco se puede obviar que un resultado lo cambia todo. Porque de haber perdido contra el Nàstic, habría finalizado la primera vuelta en zona de descenso. El número de "suspensos" aumentaría. Y reconozco que mi nota bajaría. Hablé antes de "lo merecido", dos palabras tan repetidas por Pacheta, pero lo que cuenta en la clasificación son los puntos.
La segunda vuelta arranca esta semana. El tramo decisivo. Durísimo en una categoría tan competida. El Elche lo iniciará con tres hombres importantes lesionados: Neyder, Borja Martínez y Gonzalo Villar. Varapalo para Pacheta, quien lamenta que varios de los cuatro refuerzos van a cubrir bajas.
Sobre el papel, Nacho Gil, Dani Calvo, Edgar Badia y Karim Azamoum aumentan el nivel de la plantilla. El central y, sobre todo, el portero, cuajaron una gran actuación en su debut en el Martínez Valero. Es un buen comienzo de etapa. Pero después de la experiencia con los Fabián, Borja Valle y Túñez en la temporada del descenso, mucha calma y nada de dar algo por hecho.
El sino lógico del Elche, por su potencial y trayectoria, es que sufra hasta el final por lograr la salvación. Así lo recalca el míster. Pero tengo la esperanza y le veo capacitado para alcanzar el objetivo con cierta holgura, evitando tardes de taquicardia pendientes de otros campos y echar cuentas. Hay muchos ejemplos en campeonatos pasados.
Pero hay que ir paso a paso. Mentalizados de que queda mucho por pelear y sudar. La primera cita de la segunda vuelta será muy difícil, visita al líder Granada. Después, tendrá que medirse a varios rivales directos. Ahí puede estar una de las claves del recorrido. No obstante, primero a #GanarAlGranada.