ALICANTE (EP/AP). El pleno del Ayuntamiento de Alicante ha rechazado este juves, al debatir dos declaraciones institucionales presentadas por PP y Guanyar en sentidos opuestos, dar respaldo a la implantación de una posible tasa turística, en referencia al acuerdo aprobado por las Corts Valencianes el pasado 15 de septiembre, a propuesta de Podemos en el transcurso del Debate de Política General, en relación al inicio de estudios sobre el aplicación de ese gravamen.
En primer lugar, se ha aprobado la petición del grupo municipal del PP que solicitaba al pleno que se opusiera a la tasa. Y, en segundo término, se ha rechazado el planeamiento de Guanyar que pedía apoyar su implantación el año que viene.
El debate se ha celebrado de manera conjunta mientras que las votaciones se han realizado de manera separada. Así, la declaración del PP ha salido adelante con el respaldo propio, de PSOE y los dos no adscritos (16), ocho votos en contra -Compromís y Guanyar-, y cinco abstenciones, de Ciudadanos. La de Guanyar ha sido rechazada por 19 votos en contra, cinco a favor (Guanyar) y cinco abstenciones (Cs).
El portavoz del PP, Luis Barcala, ha recordado "la unanimidad" del sector en contra de la tasa y ha apuntado que es "contraproducente para el sector y para el empleo". Barcala ha pedido tener en cuenta esa opinión porque "son los que saben de esto" y los que "se juegan los cuartos en esta película".
El edil 'popular' ha suscrito los 20 argumentos expuestos por las patronales y ha incidido en que el turismo valenciano se ve "beneficiado" porque otros destinos están "afectados por sus situaciones internas" que "tarde o temprano" se recuperarán y cabe estar "preparados". Además, se ha mostrado preocupado por el turismo ilegal que se vería beneficiado por "la diferencia de precios" con respecto al alojamiento reglado.
Por contra, desde Guanyar, Miguel Ángel Pavón, ha alegado a favor de la tasa en que ya está implantada en Barcelona y Baleares y ha cuestionado que se tenga "poca confianza" en el destino turístico de la Comunitat. Pavón ha planteado que no se "criminaliza al turista", sino que se trata de que "colabore" con las miras puestas en "mejorar en calidad" de cara a un nuevo "modelo productivo".
Pavón ha hablado de la tasa como "retorno social" y ha defendido que el sector se homologue con los países del entorno. "Es una herramienta económica que contribuirá a luchar contra la economía sumergida en el sector turístico y contra la precariedad laboral del sector", ha asegurado.
Frente a ello, el portavoz de Compromís, Natxo Bellido, ha justificado el voto en contra a las dos propuestas porque "no se aporta nada" con declaraciones institucionales y ha apostado por trabajar "con el sector" para encontrar "una tasa". Al respecto, ha puesto como ejemplo que en Baleares había un rechazo por parte del sector y ahora "está absolutamente normalizada y está funcionando bien".
Por su parte, los no adscritos, Nerea Belmonte y Fernando Sepulcre, han rechazado la tasa al considerar que es "una aberración". Ademas, Sepulcre ha dicho que competidores como la Manga del Mar Menor (Murcia) están "locos" porque se instaure.
La portavoz de Ciudadanos, Yaneth Giraldo, ha justificado la abstención de su grupo en que se trata de una cuestión "demasiado importante como para usarla como moneda de cambio, como hace Podemos". Por ello, ha reclamado una mesa de trabajo que llegue a una decisión de consenso.
Finalmente, desde el PSPV, la edil de Turismo, Eva Montesinos, ha tildado la tasa como "piedra contra nuestro tejado" porque ataca la economía alicantina y provoca "una pérdida de competitividad". Y ha anunciado que, si se deja su aplicación en manos de los ayuntamientos, Alicante no la adoptará "bajo ninguna circunstancia".