ALICANTE (EFE). Las comuniones y confirmaciones previstas para los meses de mayo y junio han quedado formalmente pospuestas hasta, como mínimo, pasado el verano, según ha comunicado hoy el vicario general del Obispado de Orihuela-Alicante, Vicente Martínez.
Debido a las restricciones derivadas de la pandemia del coronavirus (Covid-19), el vicario general ha propuesto aplazar estas celebraciones litúrgicas al cuatrimestre entre septiembre y diciembre de 2020 siempre que no haya una recomendación contraria de las autoridades sanitarias.
Martínez deja que cada párroco pueda determinar las fechas teniendo en cuenta otros acontecimientos parroquiales que también se han suspendido provisionalmente a causa del virus, como bodas, misas de difuntos, celebraciones patronales y procesiones.
"Una vez que se concluya este estado de alarma y las autoridades gubernativas y sanitarias determinen que definitivamente ha pasado el riesgo de contagio y todo vuelva a su funcionamiento habitual podremos precisar exactamente las fechas de estas celebraciones sacramentales", señala en la nota.
Esta decisión se produce dos días después de que el Arzobispado de Valencia informara de la necesidad de posponer la celebración de las primeras comuniones y confirmaciones a los meses de septiembre y octubre, dadas las circunstancias actuales de emergencia sanitaria.