Por qué el Hércules CF volverá a ser lo que fue

En los momentos difíciles es cuando hay que sacar lo mejor de cada uno y emprender importantes retos entre todos para conseguir grandes logros. Es lo que necesita el Hércules CF, no hay excusas, no vale mirar para otro lado, es nuestro Club, ese que fue creciendo con la ciudad hasta hacerse grande. Nunca mejor dicho, ya verá por qué. “El éxito no es un accidente. Es trabajo duro, perseverancia, aprendizaje, estudio, sacrificio y, sobre todo, amor por lo que estás haciendo o aprendiendo a hacer”, en palabras del gran Pelé. 

El Hércules CF lo fueron fraguando muchas personas de toda condición que tenían el deporte y la deportividad como horizonte. Uno de ellos nos lo contó todo. Daba gusto escuchar lo que nos decía, con todo lujo de detalles gracias a su propia experiencia. Si había un tema que le apasionaba, ese era el Hércules CF. Ya verá por qué. Sentados a su alrededor nos dijo muchas cosas. Antes de seguir le diré que esa persona fue Pascual Rosser Guixot, mi abuelo paterno. Sabía tanto del Hércules CF por su condición de socio fundador, guardameta, directivo de su Junta Directiva durante varios años y aficionado para siempre. Un día me hizo esta pregunta: ¿sabes por qué se llama Hércules el equipo de fútbol de Alicante? Buena pregunta, pensé. Ahora resolveremos este enigma, pero ¿no se lo ha preguntado nunca, no ha tenido la curiosidad de conocer su origen? Mi abuelo me desveló el misterio. Ahora verá.

Permita antes que le comparta unos datos útiles relacionados con el nombre del Hércules CF. No hay ninguna ciudad en España con más de cien mil habitantes que no llame a su equipo de fútbol con su nombre o con su gentilicio, salvo Alicante. Además, no hay ningún equipo de balompié en el mundo con este nombre. Si me apura, le diré que el Iraklis de Tesalónica (Grecia) lleva a Hércules en su escudo, como lo tiene el de Cádiz junto a dos columnas y dos leones. Por su parte, hay un equipo de fútbol belga que se llama Heracles Almelo y su camiseta es blanca con rayas negras. Casi igual, me dirá, pero deje que me explique. En la mitología griega Heracles era un héroe, un semidiós. En la mitología romana se le llamaba Hércules. Fue el más grande de los héroes míticos griegos, semejanza de la masculinidad, siendo la fuerza su atributo principal. Vamos avanzando, ¿me sigue?

El fundador del Hércules CF fue una persona muy conocida en la ciudad, deportista y muy futbolero. Y no lo tenía fácil por una deformación producida por un grave percance cuando tenía dos años. Su nombre es Vicente Pastor, “el Chepa” (1902-1939). Sus limitaciones no le impidieron disfrutar y fomentar el fútbol, cumplir sus sueños y con él los de otros muchos.

En una tertulia de amigos manifestó que quería fundar un equipo de fútbol. No todos se lo tomaron en serio. Sin embargo, junto a los incrédulos y los críticos, estaban los más apasionados, los que animaban al Chepa a seguir adelante. A su vez, si se hacía un nuevo equipo de fútbol, tenían que ponerle nombre por lo que abrieron un debate en el que cada uno daba su opinión. Sin proponérselo, se pusieron de acuerdo. Ahora le digo cómo. Uno le dijo al Chepa que como “eres tan fuerte; llámale, Hércules”. Entre bromas, ese club ya tenía nombre. Tan bueno como exclusivo, como ya le he contado. En otro momento, otros le manifestaron que era un echado para adelante, “eres un machote” le dijeron. De repente, un grupo de la tertulia gritó “¡macho el Hércules!”, corroborado por los demás a voz en grito. ¿Se imagina la escena? En un ambiente festivo se decidió que “Hércules” sería el nombre del club y “macho el Hércules” el grito que la afición dice y canta en las gradas de los campos de fútbol para animar a este emblemático equipo de fútbol alicantino que ha recorrido miles de kilómetros enarbolando los colores de Alicante y los valores del Hércules. La fuerza entre ellos, como arma para levantarse ante la adversidad, para volver a ponerse de pie y conseguir grandes victorias; para marcar goles; para dar satisfacciones a su afición.

De jugar en campos baldíos en lo que hoy es la plaza Calvo Sotelo, al Estadio Rico Pérez. Un gran campo de fútbol, con una forma extraña, deforme para algunos, pero que puede albergar encuentros deportivos de primer nivel como algunos de la Selección española de Fútbol o los de la Selección Argentina, Francia y Polonia durante el Mundial de Fútbol que se celebró en España en 1982. La Selección Argentina lo hizo su sede por lo que se veía por Alicante a Maradona o a Kempes, despertando el interés de la afición futbolera. El astro argentino hizo vibrar las gradas herculanas con sus goles. En el campo se vio a buenos jugadores de fútbol que “no necesitan ser titanes esculpidos por Miguel Ángel. En el fútbol, la capacidad es mucho más importante que la forma, y en muchos casos la habilidad es el arte de convertir las limitaciones en virtudes”, dijo el periodista Eduardo Galdeano.

Ya ve, el nombre del Hércules CF nació de una broma. Hoy algunos se ríen del declive de este club olvidándose de sus esfuerzos, de sus logros, de su historia. Ni los alicantinos, ni las instituciones públicas y privadas de la ciudad, ni el Ayuntamiento de Alicante, darán la espalda a este equipo. Representa mucho para todos. Es la disposición positiva lo que hará grandes las acciones de todos. Ya lo dice Víctor Kuppers, experto en motivación, al manifestar que “la actitud que pongamos en la vida es el eje central para que seamos personas más motivadas, entusiastas, alegres y optimistas”, añadiendo que “nuestras habilidades suman y aportan valor, pero en realidad lo que hace que esos conocimientos se vean reflejados en el valor que proyectamos es la actitud y su acción multiplicadora”. 

El Hércules CF ascendió a Primera División en reiteradas ocasiones. Si fue grande entonces, no le quepa duda que lo volverá a ser mañana. Que así sea.