ALICANTE (EFE). Pol Roigé, extremo del Hércules, afirmó este miércoles que a pesar de que no hay nada en juego, el equipo alicantino quiere ganar al Atlético Baleares, líder del grupo, para finalizar la competición con buenas sensaciones.
El Hércules, segundo en la tabla, recibe este sábado al conjunto balear, primero y ya campeón, por lo que el resultado del partido no afectará a la clasificación de ambos equipos para afrontar la fase de ascenso.
"El equipo está con buenas sensaciones y queremos acabar así, con esta buena dinámica", dijo el jugador catalán, quien añadió que una vez finalice el partido ante el líder "ya tendremos tiempo de pensar en lo importante", en alusión a la fase de ascenso.
Roigé destacó que el encuentro, además, es "importante" para aquellos jugadores que han disputado menos minutos a lo largo de la competición, ya que les permitirá "coger ritmo" para la fase de ascenso.
El jugador barcelonés aseguró que todo el equipo está centrado en el partido ante el Atlético Baleares y que no se especula con un posible rival en la primera eliminatoria, si bien señaló que "cualquiera que pueda tocar será complicado".
Roigé calificó la temporada del Hércules como "muy buena" y afirmó que la fase de ascenso llegará "en el mejor momento" del curso, tras encadenar el equipo varias victorias y seis partidos sin recibir un gol.
El extremo, que comenzó la temporada como titular, asumió su actual rol de suplente y dijo trabajar cada día "para estar preparado cuando llegue la oportunidad".
El jugador, que confió en lograr este año el ascenso tras la decepción sufrida el pasado curso en la promoción con el Celta B, indicó que el Hércules no debe cambiar en la fase de ascenso y seguir "con la mentalidad de ir partido a partido y sin mirar más allá".