VALÈNCIA.  El Valencia Basket recibe este viernes al Baskonia en busca de venganza tras su reciente derrota en Vitoria en la Liga Endesa y lo hace en un duelo directo por mantenerse en la zona de la clasificación que da derecho a superar esta fase regular de la Euroliga.

El conjunto valenciano afronta este encuentro tras una reparadora victoria en la acb en la pista del Zunder Palencia este sábado, pero la mejoría de las sensaciones no cambia que arrastra una racha de cuatro derrotas seguidas en la Euroliga que le ha descabalgado de la zona noble.

El equipo de Álex Mumbrú es noveno con un balance de cinco victorias y otras tantas derrotas, el mismo que tiene el Baskonia, que es séptimo, y el Anadolu Efes, que es undécimo y ya estaría fuera de esas plazas que permiten luchar por la Final Four.

En el encuentro que ambos equipos disputaron en el Buesa Arena, el equipo que vuelve a dirigir Dusko Ivanovic se impuso por 83-74 sin el concurso de Markus Howard, su gran referencia exterior en ataque. El Valencia, lastrado por el cansancio y los problemas físicos, fue de más a menos.

El escolta estadounidense ya ha vuelto a jugar con el equipo vasco y junto con Chima Moneke, Tadas Sedekerskis o Matt Costello son las referencias más estables del equipo de Ivanovic en los últimos partidos por lo que la dificultad para el equipo 'taronja' se incrementará en ese sentido.

Respecto a esa cita de Vitoria, el Valencia ya ha recuperado a Jared Harper, un jugador que le hace menos previsible en ataque pero el técnico aseguró que es difícil que puedan contar con Martin Hermannsson, que esta semana se ha incorporado a los entrenamientos tras haber sido operado de la rodilla izquierda en septiembre, ni con Stefan Jovic, que lleva diez días fuera por un esguince.

Si ambos jugadores finalmente no están el peso de la dirección del equipo en la pista volverá a caer en Chris Jones y en Guillem Ferrando, que podría estar ante una de sus últimas grandes oportunidades para reivindicarse antes de que se le multiplique la competencia.