ALICANTE. Un día después de aprobar la solicitud del Valencia Basket para ampliar de 150 hasta 400 espectadores el aforo del pabellón Fuente de San Luis de cara a los partidos de la Eurocup Women que disputa esta semana, la conselleria de Sanitat ha denegado la solicitud de la Fundación Lucentum para jugar el próximo viernes en el Pedro Ferrándiz ante igual número de espectadores frente al Liberbank Oviedo el primer partido de la segunda fase de la LEB Oro.
La clave se encuentra en el texto de la resolución publicada el pasado viernes en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana, una resolución con nuevas medidas anti-Covid vigente desde el lunes y hasta el 12 de abril. En la misma se mantiene la limitación del 30% del aforo con un máximo de 150 espectadores vigente desde el 5 de diciembre para "las competiciones autorizadas", pero se incluye la previsión de que "excepcionalmente, con autorización expresa de la conselleria competente en materia de salud pública, podrá autorizarse una mayor presencia de público", para "competiciones oficiales no profesionales de ámbito internacional y en finales de competiciones oficiales no profesionales de ámbito estatal". Se trata, por tanto, de un trato desigual y más que cuestionable (la capacidad del pabellón Pedro Ferrándiz es de 3.000 localidades y el HLA Alicante cuenta con un protocolo de salud e higiene para jugar ante 1.300 espectadores que el Consell conoce bien porque se lo adjunta a cada solicitud de aforo)... pero legítimo.
Flexibilización pendiente