ALICANTE (EFE). Lluís Planagumà, entrenador del Hércules CF, restó importancia este viernes a las condiciones del terreno de juego del Ebro, de césped sintético, y afirmó que su equipo debe adaptarse a todas las circunstancias y condiciones que caracterizan al grupo III.
"Le doy cero importancia al campo sintético, ya que los jugadores deben adaptarse a cualquier contexto y situación, igual que los rivales también tienen que adaptarse cuando salen de su contexto", explicó el preparador catalán.
"Tenemos que ser trabajadores, solidarios y estar atentos pero en todos los campos porque cualquier rival. Cada partido es distinto, pero tenemos que afrontarlo con la misma ambición y haciendo nuestro juego", argumentó el técnico del Hércules.
Planagumà negó que la visita al Ebro sea un "partido trampa", ya que indicó que en Segunda B "todos los encuentros son difíciles y competidos" y negó que al equipo le pueda pesar su mala dinámica en las visitas al equipo aragonés.
"No nos interesa lo que haya pasado antes sino lo que estamos generando desde que empezamos a entrenar en julio", señaló el técnico, quien confirmó que Paco Candela ya está recuperado de su lesión en la rodilla, si bien advirtió que no hay necesidad de arriesgar.
El entrenador definió al Ebro como un equipo" intenso y muy vertical" que propone siempre acciones de ataque y recordó que cuenta con un equipo nuevo que irá "creciendo" durante la competición.
"Es posible que estén cansados por la Copa del Rey, pero también muy motivados por el hecho de seguir adelante en la competición", dijo Planagumà, quien precisó que su equipo deberá estar "atento y concentrado" al juego durante todo el encuentro.
"Tenemos que ser un equipo flexible que también debe crecer porque solo llevamos tres jornadas", agregó Planagumà, quien no descartó realizar cambios en su equipo titular para el partido ante el conjunto aragonés.
"No se trata de dar oportunidades, sino de méritos a los jugadores que han estado trabajando bien durante la semana", concluyó.