PETRER. “No es una decisión por iniciativa propia”, ha señalado con rotundidad el concejal de Hacienda, Ramón Poveda, al inicio de su intervención para explicar la subida de la tasa de basura en Petrer para el año 2024 por una normativa de la Comisión Europea que obliga a que las tasas públicas por prestación de un servicio, como en el caso de la recogida de basuras, deben de recaudar el coste real del servicio. Poveda ha remarcado que “llevamos ocho años gobernando y ocho años de congelación de impuestos y tasas, por lo que repito: esta no es una decisión por iniciativa propia del equipo de Gobierno porque no forma parte de nuestro ADN como hemos demostrado durante todo este tiempo”.
El edil ha explicado que el incremento en las viviendas pasará de 49,92 euros actual a los 118,61 euros del coste real. Después de la subida, la tasa de Petrer continuará siendo una de las más bajas de la provincia. De tal forma que para una familia, la recogida de residuos diaria, su transporte y tratamiento, el mantenimiento de vehículos y contenedores, la recogida de enseres y el servicios de ecoparques, tiene un coste de apenas dos euros a la semana.
Aún así, el ejecutivo local ha anunciado ayudas que permitirán sufragar el 50% del coste de la tasa que podrán alcanzar hasta 2.000 familias con las rentas más bajas ya que “entendemos que es un colectivo al que tenemos que seguir protegiendo y, por tanto, lo vamos a hacer como hasta ahora”. También se ha establecido con SUMA, que el pago de la tasa se fracciones en dos recibos semestrales, además de las opciones de fraccionamiento habituales de las que ya dispone esta entidad. Solo las industrias, quienes han tenido que hacerse cargo por ley del tratamiento de los residuos industriales, se verán afectadas por una rebaja de la tasa, al dejar de tener incluido este concepto.
En Petrer, en los últimos seis años, el coste que conlleva la recogida de residuos urbanos y su traslado a la planta de basuras de Villena para su tratamiento ha pasado de 1´8 MM al año a 2´9MM incluyendo 400.000 euros de un nuevo impuesto sobre el residuo generado. Sin embargo, la tasa municipal se ha mantenido 10 años congelada, siendo de las más baja de la provincia. Su recaudación solo cubre hasta el momento 1,2 millones de euros, lejos de los casi 3 millones de coste actual del servicio.
El edil ha indicado que “esta subida no es una cuestión de color político sino de responsabilidad institucional ya que de no cumplir con la normativa el Ayuntamiento se expone a graves sanciones por parte de Europa”. Y ha señalado que ya hay muchos ayuntamientos, de diferente signo político que han anunciado que subirá la tasa como Benidorm, gobernado por el presidente provincial del PP y presidente de la Diputación de Alicante cuya tasa pasará de 112 a 193 euros anuales; la vecina población de Novelda que la ha situado en 128,7 €; el municipio de Altea gobernado por PSOE y Compromis que pasa de 75,84 € a 97 €; y Dolores, en la Vega Baja, que sitúa la tasa de 90 a 140 €.
“A su vez instamos tanto a Consorcio de la Planta de basura dependiente en gran parte de la Diputación y la Generalitat Valenciana a reducir el coste del tratamiento que permita disminuir este aumento en la tasa”, ha indicado el edil quien ha señalado que es algo que planteará cuando se forma dentro de unos días la nueva dirección de este organismo que conforman varios municipios.
Respecto al IBI y al resto de ordenanzas municipales, con alguna posible modificación puntual, la apuesta del gobierno municipal va a ser la de la congelación por 9º año consecutivo. “Lo que nos habría gustado también, pero la ley no nos lo permite, con la tasa de residuos”, ha finalizado el edil.