VALÈNCIA. En las declaraciones de la secretaria autonómica de Modelo Económico y Financiación, María José Mira, a Alicante Plaza subyace la opción por el modelo económico liberal definido por el papel residual del Estado en la economía y una fe ciega en el libre mercado y la superior eficacia de la gestión privada. En nada engaña la Sra. Mira, es coherente con la que ha sido su profesión, que ha estado vinculada a la patronal sociosanitaria a través de la Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas dependientes de la Comunidad Valenciana (Aerte) en calidad de directora general, su anterior cargo antes de dedicarse a la administración pública.
Las declaraciones públicas de un alto cargo no encajan en el compromiso electoral del partido socialista, ni las bases del pacto del segundo gobierno del Botánico, máxime en unos tiempos en los que hay que potenciar el valor de lo público, por lo cual es motivo suficiente para que, de manera fulminante, se procediera a su separación automática del cargo sino se quiere poner en entredicho la acción del mismo gobierno y generar incertidumbre en el electorado sobre el cumplimiento de los compromisos electorales.
En el área de Sanidad y Salud Pública no es la primera vez que hay voces socialistas que dudan de la eficiencia y eficacia de la gestión pública directa por parte de la Conselleria de Sanitat una vez concluyen los contratos de las concesiones sanitarias y que dan alas a los defensores de la privatización de la sanidad pública. Esto es incomprensible si estas voces proceden de cargos públicos que gestionan nuestra sanidad como es el caso de la Sra Mira
Si ya su compromiso con lo público es cuanto menos dudoso por su anterior puesto como directora general de la asociación empresarial de residencias, sus declaraciones en Valencia Plaza abogando por la eficiencia de la colaboración público-privada e indirectamente acusando a los gestores públicos de ineficientes, no son tolerables, ni tampoco las merecen los miles de profesionales y trabajadoras sanitarias que están trabajando en primera línea contra la pandemia. Necesitamos más y mejor sanidad pública. No aceptamos convertir lo que es un derecho en un negocio para empresas amigas
Desconocemos que estudios científicos avalan sus declaraciones y afirmaciones a favor de las privatizaciones de lo público (que es lo que realmente esconde la colaboración público-privada), pero lo que sí sabemos es que la sanidad pública se ha demostrado mucho más eficiente que la privada y más necesaria que nunca en la realidad epidémica actual. Además de que los pactos de reversiones sanitarias del Consell tienen por objetivo la gestión eficiente de lo público y menos negocio para lo privado.
Si desde su cargo no está preparada para el reto que esto supone y no cree en lo público, lo que debe hacerse es ser destituida de forma inmediata y volver a la gestión privada de dónde procede.
No queremos cargos públicos en sanidad que no crean en la gestión pública, por lo que exigimos una separación de los mismos desde ya, pues la reversión del departamento de Torrevieja por finalización de contrato es inminente y para llevarla a cabo con garantías exigimos responsables que crean en el proyecto del Consell y no pongan en riesgo los pactos del Botánic 2.