ALICANTE. Durante su discurso de clausura del Curso Académico 2018-19 el rector de la Universidad de Alicante, Manuel Palomar, ha vuelto a apelar al Efecto Mateo para reivindicar la aprobación del Grado de Medicina por parte de la Generalitat Valenciana. “Al que tiene se le dará y tendrá en abundancia; pero al que no lo tiene, se le quitará (Mateo 13.12)”, ha dicho. El rector ha asegurado que “hemos abusado de la contención para no interferir con más ruido del necesario en el proceso de toma de decisiones” pero se ha mostrado convencido de que “más pronto o más tarde, la oferta privada, con costes más elevados y menos credibilidad y confianza, suplirá a la pública en nuestra provincia”. Así, Palomar asegura “no entender, o entender mal, que una provincia infradotada deba permanecer sumida dócilmente en su desalentador y desalentado estado”.
En un contexto en el que se acaba de hacer público que en los próximos ocho o diez años será necesario incrementar las plantillas de los hospitales valencianos entre 3.000 y 5.000 profesionales y que después de Andalucía somos la comunidad con una ratio más baja de médicos especialistas por habitante –según informe del Ministerio de Sanidad- el rector sostiene que “nosotros no abdicamos de nuestra responsabilidad de identificar demandas sociales y proponer ofertas innovadoras de formación”.
En su intervención también ha anunciado la reciente modificación del Plan General de Ordenación Urbana, que permitirá la ampliación del Parque Científico con una superficie adicional de 800.000 metros cuadrados; así como la luz verde del Ayuntamiento de Alicante a la licencia para la construcción del Centro de Empresas, edificio emblemático para la UA en su zona de ampliación.