ALICANTE. Usar el teléfono, sin más, para asegurar la seguridad del aparcamiento personal. Es la iniciativa que desarrollan PacParkIn, una startup creada en Alicante con el propósito de llevar adelante una idea surgida como trabajo de fin de máster cuando sus tres socios cursaban un Master en Dirección y Administración de Empresas. Desde Distrito Digital trabajan en la primera versión de inicio de la startup, que planea seguir trabajando en mejorar su producto inicial, incorporando integraciones que hagan aún más útil el sistema de apertura remota.
Desde PacParkIn han creado un dispositivo de bajo coste que permite actuar sobre cualquier automatismo de garaje ya instalado desde una app en el smartphone. Así, quieren convertirse en la "evolución del mando a distancia", sustituyéndolo por una aplicación en el dispositivo móvil. "De este modo, se elimina la necesidad de disponer de un mando por usuario o vehículo, el mantenimiento por el cambio de baterías, la sustitución por rotura o las desconfiguraciones", aseguran desde la empresa emergente. La clave para su funcionamiento es el uso de una conexión de datos a internet con SSL, la misma seguridad de comunicación que cualquier web segura, con los datos encriptados. Además, se mantiene un registro de las operaciones que realiza cada usuario.
Desde septiembre de 2020 participan en este proyecto en el proponen que, mediante un dispositivo de bajo coste e instalación extremadamente sencilla, cualquier puerta ya automatizada se puede complementar para poder acceder sin utilizar otra cosa que el móvil, pero manteniendo las formas de apertura que ya existieran: mando a distancia, llave. De este modo, se haría compatible con múltiples modos de apertura. "Una vez instalada, es cuando se puede comprobar que, además de la comodidad de no tener que disponer del mando, se obtiene un mayor control y seguridad del acceso controlado con al disponer de funcionalidades avanzadas", apuntan desde la startup.
Y estas funciones pasan por la posibilidad de añadir usuarios y otorgar permisos de acceso fijos o temporales -por fechas y horas-; tener un registro de la actividad realizada mediante la app, consultable por quien la administra. Otra opción es la de apertura remota, sin estar físicamente en un rango determinado de cobertura. Entre los casos en los que puede resultar útil esta herramienta, destacan: instalaciones colectivas donde existe poco control sobre los usuarios que las utilizan y se deben gestionar constantemente mandos o llaves (como aparcamientos comunitarios o empresas con flotas).
Para usar el dispositivo, de forma complementaria a mandos a distancia, tarjetas o pulsadores que ya se encuentren instalados, se debe disponer de puertas en las que ya exista un automatismo. Además, para poder operar se debe comprar e instalar el dispositivo. Después, la aplicación está disponible en Google Play para Android o en App Store para IOS. La compra del dispositivo incluye un año de suscripción. Una vez transcurrido un año, se abonará una cuota que variará en función del número de usuarios que la utilizan y sin límite de personas que pueden usarla.