LA CORUÑA. Satisfecho con el encuentro y el resultado cosechado por los suyos. José Rojo 'Pacheta', entrenador del Elche, celebraba en la sala de prensa de Riazor "el partido serio, duro" firmado por su equipo del que destacaba que había "sabido sufrir" y se había mostrado "contundente en las áreas".
Para el técnico franjiverde, que volvió a deshacerse en elogios hacia un rival, su afición y el ambiente en su estadio, el Elche tuvo "durante muchos minutos" el control del partido ante "un equipo herido, pero que cuenta con grandes futbolistas", decía Pacheta que abogaba por seguir siendo "humildes": "Segunda victoria consecutiva y 22 puntitos (...) nosotros a lo nuestro y siguiendo humildes (...) quiero que detrás de grandes victorias vengan, al menos, grandes sensaciones".
Pacheta no quería destacar a ningún jugador por encima de los demás, pero terminó elogiando a Fidel y Josan, de los que dijo que habían tenido fiebre durante la semana y habían estado a punto de no jugar, de ahí los cambios "antes de tiempo" y, especialmente a Nino: "Hay que ponerle en las escuelas de fútbol como ejemplo de lo que hay que hacer".
