Pacheta: "El gol de ellos llega en un acción que hemos defendido terriblemente mal"

ELCHE. "No nos hemos sentido cómodos desde el primer minuto (...) no hemos entrado bien y, salvo algunos ratitos, no hemos hecho un buen partido". Sin paños calientes llegaba José Rojo 'Pacheta' a la sala de prensa del Manuel Martínez Valero este sábado, tras la derrota de su equipo ante el Sporting de Gijón.

El técnico franjiverde abogaba por "analizar lo que ha pasado y recuperar a los jugadores", huyendo de dramatismos: "No hemos estado bien y éramos el mismo equipo (que en Girona); ni el otro día medíamos 1,90 y olíamos muy bien, ni hoy somos ogros y tan malos, esta es la realidad del fútbol", decía Pacheta que recordaba que su equipo se había dejado el alma, pero también "corrido mal y perdido demasiados balones en zonas muy peligrosas ante un rival que destaca por sus transiciones, que juega muy bien al espacio". 

Para el entrenador burgalés, el Sporting había ganado "con mucho oficio" y merced a un gol que llegó en una acción que habían defendido "terriblemente mal". Valoraba positivamente el desempeño de los suyos en acciones a pelota parada, pero se mostraba contrariado por que no hubiesen encontrado en ellas el camino del gol en un partido que "era para meterla en un centro o en un balón parado".

Daños colaterales

"Mi afición solo nos ve ganar en la tele; cómo no me va a doler, pero mañana a entrenar (...) partidos malos hacen todos los equipos", insistía Pacheta que se mostraba una vez más crítico con el pobre estado del terreno de juego, aseguraba que no entendía cómo el árbitro había concedido solo cuatro minutos de alargue y lamentaba profundamente los daños colaterales que dejaba el choque en forma de lesiones, más que por tener una plantilla corta, por afectar las bajas a las mismas posiciones y es que después de perder a Mfulu en el primer tiempo por una lesión muscular (el franco congoleño podría sufrir una rotura en el adductor), Gonzalo Villar, su sustituto, también ponía fin al choque antes del minuto 90 por un golpe en las costillas.