Orihuela delimita las terrazas con señales verticales y la Policía controlará que se cumpla el horario

ORIHUELA. Reorganizar el espacio que ocupan terrazas de bares y restaurantes en la vía pública, volver a la situación anterior a la pandemia en cuanto a horarios y metros autorizados a cada local y que los aparcamientos ocupados por los locales queden libres cuando la persiana esté bajada. Este es el objetivo de la campaña que está realizando la Policía Local de Orihuela en la que se está informando a los diferentes locales del casco urbano de que las medidas excepcionales por el coronavirus, que permitió ampliar las terrazas para aumentar las distancias de seguridad entre las diferentes mesas sin reducir su número, han llegado a su fin. La principal novedad en este sentido llega de la mano de las terrazas que se instalan en la calzada, y que a partir de ahora serán señalizadas verticalmente delimitando no solo el espacio físico que ocupan sino también los días y horas en los que esos aparcamientos quedan reservados a para el uso de la hostelería, pudiendo estacionar el resto del tiempo. De esta forma, si un bar cierra el lunes o solo instala terraza los fines de semana, solo se reservará el espacio los días que monte la terraza. 

Así, se han instalado ya varias señales verticales delimitando el espacio ocupado por cada local, y el horario en el que se aplica ese “prohibido estacionar”. Los agentes llevan ya varias semanas visitando los diferentes locales del caso urbano e informando de las nuevas condiciones para la instalación de las terrazas que, en definitiva, pasarán a ser “las recogidas en la ordenanza antes de la pandemia”, ha explicado Boix. Así, se seguirá la “regla general de que cada local solo podrá ocupar el espacio en la vía pública perteneciente a su fachada y, si el local de al lado lo autoriza, también ese espacio”.

En cuanto al horario, también se volverá al original, ya que la ordenanza recoge que, como máximo, se podrán instalar terrazas hasta la 1 de la madrugada, con el objetivo de “garantizar el descanso vecinal”, ha explicado el edil. Los agentes informarán a los locales de que deben cumplir estos horarios y se sancionará a quienes no lo respeten. La ordenanza recoge que el horario de terrazas es de 8 a 1, pero en algunos casos se ha dejado un margen de una hora al inicio de la jornada para las labores de montaje y preparación de los hosteleros. 

Estas medidas se enmarcan en la propuesta que el equipo de gobierno de Orihuela llevará al Pleno de mañana para prorrogar la suspensión de la la tasa por la instalación de mesas y sillas hasta diciembre de 2023. Aix ya ha adelantado que, al margen de esto, también se está trabajando en una modificación más amplia de la ordenanza con el fin de mejorar otros aspectos como la accesibilidad. 

Quienes han manifestado su voto en contra a ampliar la supresión de las tasas de terrazas ha sido el PP de Orihuela. Su portavoz, Rafa Almagro, ha explicado esta mañana que su grupo ha presentado una enmienda para que los hosteleros estén libres de pagar esta tasa solo hasta el 31 de diciembre de este año, y no hasta finales de 2023 como propone el equipo de Gobierno. Los populares consideran que la justificación para la exención de la tasa, que se suprimió en multitud de ayuntamientos debido a la crisis económica derivada de la pandemia, ya no tiene sentido al levantarse todas las medidas sanitarias. Almagro ha señalado que “consideramos que hay otras fórmulas para ayudar a la hostelería, pero ante la situación actual de normalidad los vecinos de Orihuela tienen derecho a descansar y a aparcar en la calle”.