ELCHE. En su visita a la ciudad ilicitana, la vicepresidenta del Consell Mónica Oltra volvía a defender la propuesta de tasa turística presentada hace unos días junto a Héctor Illueca por Podem. Sobre las críticas de la patronal hostelera hacia la propuesta, alegaba Oltra que "las kellys también son sector hotelero y seguramente tienen una opinión diferente a la patronal", y en cualquier caso defiende que "es una tasa que no tiene que pagar la patronal, vigente en muchos países y ciudades", espetaba la vicepresidenta, añadiendo que "todos sabemos que nadie deja de ir a París, Bruselas o Mallorca por pagar dos euros por noche por alojamiento".
En ese sentido, Oltra apunta que esa tasa grava el coste que tiene el turismo a nivel medioambiental o en los precios del alquiler. Sobre la propuesta para destinar esos hipotéticos ingresos a políticas de Juventud, defiende que hace unos días comentaba con el presidente Ximo Puig tras la presentación del informe del Consejo de la Juventud de España que el hecho de que la juventud no pueda acceder a una vivienda "es una amenaza gravísima para la juventud, supone que estamos impidiendo su proyecto de vida independiente", al matizar que España es uno de los países de Europa con una edad de emancipación más tardía.
Un motivo por el que ve factible que el dinero recaudado por esa tasa revierta en la promoción de vivienda para jóvenes o ayudas al alquiler. Aun así, de cara a los presupuestos autonómicos de 2022 también avanza que esa tasa turística no puede ser homogénea: "No es lo mismo alejarse en un hotel de 5 estrellas de lujo en una gran capital que alojarse en una casa rural en un pequeño pueblo de interior, no se puede poner una tasa igual para todos", zanjaba la vicepresidenta de la Generalitat, esgrimiendo que es el momento de plantear la cuestión de cara a las próximas cuentas y al momento de recuperación económica y social después de la pandemia.
