El Belles Arts lleva obras de Ribera al Petit Palais de París mientras que la Fundación Per Amor a l'Ar afianza su relación con el Thyssen
VALÈNCIA (EP/CP). La obras de arte de los museos e instituciones valencianas hacen las maletas, viajes de ida y vuelta que en estos días, entre otros destinos, suman París, Madrid o Málaga como parada. La aventura internacional corre a cargo, en esta ocasión, del Museo de Bellas Artes de València, que participa en la exposición Ribera. Ténèbres et lumière, que se inaugurará el próximo 5 de noviembre en el Petit Palais de París con el préstamo de dos obras procedentes de los fondos de la pinacoteca valenciana: los retratos de los filósofos Heráclito y Pitágoras.
El director del MuBAV, Pablo González Tornel, se ha trasladado hasta la capital francesa para acompañar la llegada de estos dos lienzos realizados hacia 1630, magníficos ejemplos del naturalismo practicado por Ribera, que lo llevó al convertirse en uno de los principales artistas del Barroco, informa la Conselleria de Cultura en un comunicado. Ribera. Ténèbres et lumière es la primera muestra retrospectiva que se organiza en Francia dedicada al pintor valenciano José de Ribera (Xàtiva, 1591 - Nápoles, 1652), maestro del naturalismo en la pintura barroca en las décadas centrales del siglo XVII.
La exposición, que podrá visitarse hasta el 23 de febrero de 2025, reúne más de un centenar de pinturas, dibujos y grabados procedentes de todo el mundo. En ella se recorre, por primera vez, toda la carrera del artista desde los intensos años romanos, recientemente redescubiertos, al ambicioso período napolitano.
Otra alianza, en este caso que se afianza, es la de la Fundació Per Amor a l'Art y el Museo Carmen Thyssen Málaga. Si hace unos meses el centro recibía parte de la colección de arte José Luis Soler con motivo de la muestra Material provocativo para pensar. Fotografía japonesa contemporánea, ahora hace lo propio con la exposición Imogen Cunningham. Esencias, una muestra que reivindica la obra la fotógrafa, "única y fundamental" en el siglo XX. La exposición se ha inaugurado este misma semana, una presentación que ha contado con la presencia de Susana Lloret, vicepresidenta de la Fundació Per Amor a l'Art e impulsora de la Colección José Luis Soler Vila.
"Es un placer para mí volver a compartir parte de la Colección de fotografía José Luis Soler con este museo, de la mano de su directora, Lourdes Moreno, por la que siento un sincero aprecio", ha expresado Lloret. Con respecto a la colección, la vicepresidenta ha expresado: “mi marido Jose Luis Soler y yo iniciamos esta colección que hoy lleva su nombre con el inestimable asesoramiento de Vicente Todolí y con la voluntad de crear una colección de colecciones que mostrara en profundidad la obra de relevantes figuras del arte abstracto y de la fotografía desde principios del siglo XX a la actualidad. Esta exposición es un buen ejemplo de ello".
Imogen Cunningham. Esencias ofrece un recorrido por la obra más representativa de los años veinte y treinta de esta fotógrafa estadounidense: una artista que acabó convirtiéndose en una de las más relevantes fotógrafas del siglo XX y que conformó un estilo propio con su búsqueda de lo esencial de las formas, tanto en el cuerpo desnudo, representado bajo una mirada desprejuiciada y retadora de las convenciones morales victorianas, como en la captación de la naturaleza, que supo reducir a sus estructuras más simples, especialmente en sus fotografías de especies botánicas.
Por su parte, el Institut Valencià d'Art Modern (IVAM) muestra una amplia selección de obra gráfica representativa de las vanguardias europeas y de la Bauhaus alemana en la exposición Tiempos inciertos. Alemania entre guerras que exhibe Caixaforum Madrid y que más adelante irá a Barcelona. La exposición, organizada por la Fundación La Caixa, revive el florecimiento cultural, creativo e intelectual de la República de Weimar, etapa marcada por la incertidumbre y la inestabilidad, pero también sinónimo de creación y progreso con influencias que llegan hasta hoy.
Para la exposición, el museo valenciano ha prestado 30 obras de algunos de los principales protagonistas de la Alemania de entreguerras, como los artistas George Grosz, John Heartfield, Moholy-Nagy, Kurt Schwitters, Raoul Hausmann, Paul Klee y El Lissitzky. Estas obras, que datan de los años 20 y 30 del siglo XX, son un ejemplo de la importante colección que posee el museo valenciano del movimiento dadá, del surrealismo o del constructivismo, corrientes fundamentales que imperaron en las vanguardias europeas.
Entre la selección destaca una decena de litografías de Grosz y otros tantos fotomontajes de Heartfield. La obra de ambos creadores, que participaron en la fundación del Club Dadá de Berlín, representa la crítica social en el periodo de la República de Weimar. Los dibujos y grabados de Georg Grosz (Berlín, 1893 - 1959) mantienen intacta su capacidad de mostrar críticamente la sociedad de su tiempo. Se trata de las carpetas de obra gráfica publicadas en Malik Verlag y otras editoriales entre 1916 y 1933, que provienen de los fondos de la Colección Marco Pinkus, adquiridos por el IVAM en 1991.
El trabajo más importante desarrollado por John Heartfield (Berlín, 1891-1968), y que el IVAM ha cedido para la exposición, lo constituye su dilatada colaboración con la revista AIZ, entre 1930 y 1938, primero en Berlín, y más tarde, desde Praga y Londres. Para la revista, Heartfield produjo 240 portadas y abundantes fotomontajes en los que se muestra la apropiación de la fotografía y sus posibilidades, la caricatura y la sátira política. Las obras de Kurt Schwitters o Raoul Hausmann son también ejemplos destacados del ámbito dadá, mientras que las piezas de Moholy-Nagy y El Lissitzky son distintas manifestaciones constructivistas en el entorno de la escuela de la Bauhaus, en la que también estuvo presente Paul Klee.
