Las obras en desarrollo en la estación de Chamartín de Madrid. Foto: AdifALICANTE (EFE/AP). Renfe reorganizará los servicios de tren que conectan Madrid con Alicante a partir del próximo 8 de abril con motivo de las obras de transformación que realiza Adif en la estación de Madrid-Chamartín-Clara Campoamor, que tienen como objetivo duplicar su capacidad para trenes de alta velocidad y larga distancia.
La nueva estructura de los servicios traerá consigo una conexión Avlo entre Alicante y Valladolid. Los billetes de este servicio se pondrán a la venta durante la próxima semana, según concretan portavoces de Renfe, a través de un comunicado.
Por otro lado, se suprimen cuatro conexiones diarias (dos por sentido) con Madrid y la oferta pasa de 30 a 26 servicios diarios. El nuevo plan de transporte se prolongará mientras duren las obras, hasta entrado el mes de julio. Las obras de mejora de Adif para ampliar y transformar la estación de Chamartín implicarán una reorganización del servicio, al afectar directamente a varias vías de la estación madrileña, con el consiguiente ajuste de la capacidad operativa de la terminal.
Para optimizar la capacidad de la infraestructura, "Renfe y Adif han hecho un gran esfuerzo organizativo con un plan de transporte que permite mantener el 95 % de la oferta de plazas actual e incluso poner en marcha servicios que conectarán Alicante con Castilla y León", según la nota de prensa.
"Por otro lado, en el momento en que Talgo entregue los nuevos trenes S106, Renfe los pondrá en circulación", lo que "permitirá optimizar la capacidad de la infraestructura y ofrecer en algunas circulaciones un mayor número de plazas", indica el comunicado.
En esta línea, Adif Alta Velocidad también ha informado sobre el avance en los trabajos de de transformación de la estación Madrid Chamartín-Clara Campoamor en nodo estratégico de movilidad al abordar la última fase con la que se completará gradualmente la duplicación de la capacidad destinada a la alta velocidad.
El comunicado apunta que la operación, que se inicia el 8 de abril, representa un punto de inflexión que contempla la conexión de cuatro nuevas vías, de la 22 a la 25, y la puesta en servicio de parte del vestíbulo de alta velocidad para responder al incremento de tráfico y viajeros, asociado a la liberalización del transporte ferroviario.
La transformación que aborda Chamartín contempla, entre otras inversiones, la duplicación del número de vías de alta velocidad, hasta un total de 12 (entre la 14 y la 25), todas ellas pasantes, más una de estacionamiento, frente a las 6 vías iniciales.
Para hacerlo posible, se han convertido a ancho estándar las vías 14 y 15 y se aborda, ahora, la construcción de 4 nuevas vías pasantes de alta velocidad (22, 23, 24 y 25), con el despliegue de vías, la electrificación y la instalación de aparatos de vía, junto a los sistemas de Control, Mando y Señalización (CMS).
Durante este período, Adif completará las cuatro nuevas vías de ancho estándar (22, 23, 24 y 25) y su conexión a la red; y pondrá en servicio parte del vestíbulo de alta velocidad, extendiéndose hacia el norte y el este sobre esas vías y ampliando, así, la superficie para los viajeros hasta los 3.700 m2, frente a los 2.500 m2 actuales.
Para ello, se actúa en el refuerzo de las pilas y la ampliación de estructuras para completar su duplicación; y se montan los fingers, unas pasarelas cubiertas que conectan con los andenes, dotadas de rampas mecánicas.
Asimismo, se pondrá en servicio el nuevo paso subterráneo de conexión con los andenes 13, 14 y 15 de alta velocidad, dotado de ascensores y escaleras mecánicas, que enlazará inicialmente a través de la T-Roja todas las vías de alta velocidad con el Vestíbulo Central y facilitará el acceso directo a Cercanías y Metro. El paso tendrá salida directa a la calle Hiedra y la bolsa de taxis.
Además, ejecutará un nuevo edificio de catering y dos nuevos pasos de evacuación bajo las vías. Mientras, trabaja en la reordenación y accesibilidad del flujo de viajeros, además de la optimización de los recorridos peatonales.
Con estas actuaciones, Chamartín incrementa su capacidad para albergar un mayor número de circulaciones de trenes de alta velocidad y un tráfico más fluido, al tiempo que aumenta la flexibilidad y da respuesta al crecimiento de los servicios de alta velocidad provenientes de la Comunidad Valenciana, Murcia y las líneas de la red de alta velocidad desde el norte de la Península.
El diseño y planificación de los trabajos en la fase con más afectación a la circulación de la transformación de Chamartín han tenido como prioridad la minimización del impacto sobre los viajeros y hacen posible su desarrollo sin interrumpir la circulación, que verá reducida el volumen diario de trenes de alta velocidad entre abril y julio por la ejecución de estas actuaciones y la carga y pruebas del nuevo software que gestiona la circulación.
Durante el período, Chamartín dispondrá de seis vías para la alta velocidad. En coordinación con las empresas ferroviarias que operan en diferentes corredores, Adif ha estimado la reducción de un máximo de 32 trenes diarios y las operadoras han reprogramado sus circulaciones y planteado soluciones, como la doble composición o el acople de servicios, con el fin de reducir al máximo las afectaciones. La planificación suprime relaciones de forma proporcional al número de trenes de cada empresa ferroviaria, manteniendo los servicios declarados como Obligaciones de Servicio Público (OSP).
Al mismo tiempo, Adif AV continúa trabajando en la parte de la estación destinada a los servicios de la red convencional y Cercanías en ancho ibérico. Este año, actúa sobre 2 vías y 3 andenes, montando aparatos en las vías 7 y 8 y modernizando la señalización en todo el ámbito de las líneas de ancho convencional. Además, sigue ampliando el vestíbulo principal hacia el norte (sobre las vías de la 5 a la 13).
Actuaciones que avanzan tras concluir la primera fase de esta transformación en diciembre, que modernizó la infraestructura en 7 vías y 4 andenes y amplió el vestíbulo principal sobre las vías 1 a 4. Asimismo, se instalaron aparatos de vía y señalización para incrementar la velocidad de circulación y facilitar la gestión de los servicios de Cercanías.
Madrid Chamartín Clara Campoamor aborda una transformación integral que la convertirá en nodo estratégico de una movilidad sostenible, multimodal e inteligente. Este hub, corazón del nuevo Crea Madrid Nuevo Norte, contará con un vestíbulo principal de 18.000 m2 -prácticamente duplicará el inicial- y un total de 25 vías: 13 para servicios de la red convencional y Cercanías y otras 12 para alta velocidad. Además, quedará preparada para un incremento previsto de hasta 6 vías más de alta velocidad. La estación dispone ya de un Vestíbulo Central subterráneo de 2.800 m2 para los usuarios de Cercanías y las conexiones con otros medios de transporte sostenibles, como la alta velocidad y Metro.
Todas estas actuaciones, con una inversión de 326 millones de euros, se completan con carácter previo a la remodelación integral de la estación y su entorno urbano, que convertirá a la estación en un nodo multimodal de referencia internacional en diseño y sostenibilidad. En su conjunto, las inversiones previstas en la transformación de Madrid Chamartín Clara Campoamor superarán los 1.000 millones de euros.
La operación contribuye a la consecución de los ODS 9 (promoción de infraestructuras fiables, sostenibles y de calidad), 11 (acceso a sistemas de transporte seguros, accesibles y sostenibles), 8 (contribución al crecimiento económico y el empleo) y 7 (eficiencia energética). Las actuaciones de Madrid Chamartín Clara Campoamor, con una inversión de 326 millones de euros, cuentan con financiación europea, a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. Financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU.
