Navarro deja manos libres a Perán en Alicante para desactivar el discurso 'anti-CEV'

ALICANTE. La presidenta del consejo empresarial de la patronal autonómica CEV en Alicante, Rosana Perán, tiene manos libres para guiar la acción de su órgano provincial como mejor le parezca. Así lo aseguran fuentes próximas a la presidenta de la patronal en la provincia, que asumió el cargo hace dos semanas tras la asamblea electoral de la organización empresarial. La vicepresidenta de Pikolinos es la primera mujer que ocupa el cargo, de nueva creación, y la primera que se convierte en vicepresidenta primera de la patronal autonómica.

La de Perán fue, como adelantó Alicante Plaza, la única candidatura a la presidencia del consejo provincial, donde está acompañada por representantes de grandes empresas de la provincia y de la Comunitat, así como por dirigentes históricos del movimiento empresarial en Alicante. El nombre de Perán no solo concitaba un enorme consenso en la provincia, sino que suponía un relevo generacional en el movimiento patronal pendiente desde hacía demasiados años, y al mismo tiempo desactivaba el discurso que defienden algunos miembros de la antigua cúpula de Coepa, y que sostiene que desde València no se pueden defender los intereses particulares de Alicante.

Para que el movimiento sea completo, según las mismas fuentes, el presidente de la patronal autonómica, Salvador Navarro, ha trasladado a su nueva vicepresidenta que tiene las manos completamente libres para tomar las decisiones que considere en defensa de los intereses de las empresas alicantinas, y que las propuestas que lleguen al comité ejecutivo de la patronal desde la provincia se aceptarán sin matices. En este sentido, la primera 'prueba de fuego' llegará con el diagnóstico que los consejos provinciales tienen que realizar de la situación en sus respectivos territorios: una foto fija de los principales problemas e intereses de las empresas de cada provincia, que servirán para definir la estrategia a corto y medio plazo de la patronal.

Como ha venido contando Alicante Plaza, el proyecto de la nueva patronal autonómica ha encontrado fuertes resistencias en la provincia, donde la extinta patronal provincial rechazó hasta el último momento perder su identidad jurídica en una eventual integración, así como la desaparición de una cierta cuota territorial que permitiera sostener un discurso alicantinista dentro de la asamblea. Con la liquidación de Coepa como consecuencia de la reclamación económica del Servef (que además ahora se ha reabierto por la vía penal, por orden de la Audiencia Provincial), varias de las asociaciones que formaban parte de la confederación pusieron en marcha la creación de una nueva, la Uepal, que está en trámite para que la Generalitat la dote de personalidad jurídica. En teoría, esta misma semana debería haber recibido una respuesta al respecto.

La pretensión de la CEV de ocupar el espacio de la antigua Cierval y dejar a la extinta Coepa al margen ha generado un profundo rechazo entre los citados dirigentes. El nombramiento de Perán y la absoluta libertad de la que gozará para tomar las decisiones del consejo empresarial buscan desactivar ese discurso y encontrar nuevos aliados en la provincia, según las mismas fuentes. La propia empresaria, que además se acaba de integrar como vocal en la dirección de Juan Riera en la Cámara de Comercio, se ha marcado el reto de unir a las empresas de la provincia, para lo cual tendrá necesariamente que lidiar con el presidente de Uepal, Miguel Baena.