MUTXAMEL. El Ayuntamiento de Mutxamel ha aprobado sacar a licitación el contrato para la recogida de residuos y limpieza viaria, que asciende a diez años y 2,4 millones de euros (2.429.645 euros) y cuyo incremento ya se reflejó en los presupuestos para 2024, con 800.000 euros anuales para el nuevo servicio. "Entendíamos que había que aumentar el coste del contrato", ha justificado Lara Llorca (PP), concejala de Contratación. El punto ha salido adelante por unanimidad. Debido a la "complejidad" de la documentación que requiere este contrato, la edil ha explicado que, en octubre de 2023, se contrató una consultora especializada que ha trabajado de manera conjunta con el cuerpo técnico y jurídico del Ayuntamiento.
Sobre el personal, ha informado de que los gastos van a suponer una media anual de 1,6 millones, aumentando la plantilla en dos trabajadores a jornada completa, por lo que pasan a ser 38 personas. Mientras que la maquinaria, que será de nueva adquisición, tendrá un coste de 372.000 euros anuales. En este sentido, se duplica el servicio de hidrolimpiadoras, se introduce una baldeadora de aceras con una pértiga hidrolimpiadora, se duplica el servicio de baldeo diario y se enriquece con desinfectante y aromatizante y se utilizará agua regenerada "para un servicio más sostenible".
También se cambiarán las 80 islas del municipio, suponiendo 290 contenedores nuevos al inicio del contrato y cada año se suministrarán 11 nuevos contenedores. Se contará con dos camiones pulpo para la recogida de poda y enseres, se incluye un nuevo servicio de recogida puerta a puerta para la fracción orgánica en los grandes productores, se amplían en 80 los contenedores de fracción orgánica de carga trasera, se implementa un sistema de recogida de animales muertos, se añade en el pliego un retén para los días festivos, "con lo que conseguiremos mantener el pueblo más limpio en esos días", ha declarado Llorca. Para que el servicio de limpieza "conviva con el descanso de los vecinos", la responsable de Contratación ha manifestado que se exige a las empresas licitadoras el cumplimiento de la normativa municipal acústica.
Sobre las intervenciones de la oposición, Jesús Alejo Iborra, concejal del PSOE, ha agradecido que el equipo de Gobierno haya tenido en cuenta las sugerencias del grupo socialista, pero ha pedido "gestión" y "control eficaz" por parte del Ayuntamiento para que no fracase, "como ha sucedido anteriormente con contratos similares". Así, ha responsabilizado al Ayuntamiento de ser quien asegure que la ciudadanía reciba un servicio de calidad.
Por su parte, Ángel Ramón Martínez, concejal de Vox, ha considerado que el alcalde de Mutxamel, Rafael García (PP), "no es un buen padre de familia", ha expresado refiriéndose a su cargo en la Alcaldía, "no es diligente". Palabras que le ha dedicado por haber convocado un pleno extraordinario para un contrato que "se sabe desde hace mucho tiempo".
En cuanto a Compromís, la portavoz, Conxi Martínez, ha defendido que el precio más bajo "no sea lo que más puntúe" y que el Ayuntamiento haga "seguimiento y fiscalización" para asegurarse de que se cumpla este pliego. Y ha sido Borja Iborra, portavoz de Esquerra Unida - Unides Podem, quien ha puesto en valor que "todos los grupos municipales" aportan propuestas, por lo que el trabajo que se aprueba "es de todos, no solo del equipo de Gobierno".
El alcalde, Rafael García, ha asegurado que el que se ha aprobado "no es un contrato similar" al de años anteriores por la duración, el estudio, el apoyo de la consultora y la colaboración "exhaustiva" de diferentes departamentos. Además, ha agradecido las aportaciones de los grupos municipales que componen el Pleno.