ALICANTE. Es una práctica habitual en grandes capitales como Madrid o Barcelona, pero no tanto en otras ciudades como Alicante que ahora también llega a la capital de la Costa Blanca. Se trata de la venta de edificios completos preexistentes, ya construidos, que salen al mercado inmobiliario en busca de rentabilidad o de un nuevo propietario interesado en darles un nuevo uso. Dos de los últimos ejemplos que se pueden contemplar en la ciudad se corresponden con inmuebles situados en emplazamientos estratégicos por su ubicación en puntos singulares del Centro Tradicional: la avenida de la Estación y la Plaza de la Muntanyeta.
En ambos casos, se trata de edificios de uso residencial provistos de seis plantas que quedan a disposición de cualquier comprador por el mismo precio: 4,2 millones, según se precisa en el anuncio de venta disponible en un conocido portal inmobiliario. El primero de esos edificios, situado en la confluencia entre la avenida de la Estación y la calle Catedrático Senante Llaudes, dispone de planta baja, seis alturas, ático y sótano como estacionamiento.
En su conjunto, cuenta con una superficie total de 3.200 metros cuadrados con la posibilidad de asumir un uso residencial compatible con el hotelero, según resalta el mismo anuncio. De hecho, se trataría de una opción que contaría con la ventaja de su posición en un punto especialmente concurrido por los visitantes que recalan en Alicante, al encontrarse a menos de 100 metros de la terminal de ferrocarril y a una distancia prácticamente equivalente respecto a la estación del tranvía de Luceros.
Y aunque se apunte que la estructura y la fachada del inmueble se encuentran en buen estado, también se sugiere la posibilidad de que pueda optarse por su demolición para construir un edificio de nueva planta. Todo, además, con la particularidad de que esa circunstancia permitiría que el inmueble pudiese ganar hasta tres plantas de sótano y una elevación más.
El segundo de los inmuebles que también permanece en venta, construido en la década de los cincuenta, se sitúa en la confluencia entre la Plaza de la Muntanyeta y calle Pintor Agrasot. O lo que es lo mismo, a tiro de piedra del eje comercial de Maisonnave y de sedes administrativas como la Subdelegación del Gobierno o la Delegación territorial del Ministerio de Hacienda, por ejemplo.
Como el bloque posicionado en la avenida de la Estación, su configuración también se compone de planta baja y seis alturas. Y, de igual modo, también permite tanto el uso residencial actual como el uso terciario, lo que daría cabida a su reconsideración como hotel o como sede de dependencias administrativas. Por lo pronto, de él se destaca que dispone de 1.456 metros cuadrados de superficie disponible.
Su precio de venta es, igualmente, de 4,2 millones, y se presenta como una oportunidad para inversores dado su emplazamiento céntrico con la particularidad de que, como el inmueble de la avenida de la estación, no quedaría incorporado al catálogo municipal de edificios protegidos, según reseña el propio anuncio, por lo que no quedaría sujeto a ningún régimen de conservación especial.