Mazón se marca un ‘Ximo, mira abajo’ en su estreno como visitante del Palau

VALÈNCIA. ‘No mires arriba’ es la película del momento. Ensalzada por unos y desinflada por otros, cuenta como un par de científicos anónimos descubren que un cometa va a impactar en la Tierra y va a destruirla y, para empezar, alucinan con lo que tarda en recibirlos la presidenta de los Estados Unidos cuando tienen una cosa tan importante que contarle y en cuál es su primera reacción. A partir de aquí todo serían ‘spoilers’ poco adaptables, pero esa desazón fue la que transmitió este lunes el nuevo presidente del PPCV Carlos Mazón a la salida de su primera reunión con el president Ximo Puig, al que le pidió que en este caso mirara abajo para que se diera cuenta de una realidad que los populares ven con un punto apocalíptico y que describió como un enorme colapso en servicios sociales y en sanidad y un no menor “infierno fiscal” al que ahora se añadirá además la tasa turística para la que auguró efectos desastrosos. Hay ratos de la peli que dan menos miedo.

Pero, más allá de interpretaciones, del encuentro pareció salir otra reunión en cuestión de semanas. El popular le ofreció “un frente común” para que la Generalitat (o al menos el PSPV) y los populares valencianos presenten una respuesta pactada al “lamentable esqueleto” de propuesta de financiación presentado por el Gobierno central y Puig habría aceptado. Ese acuerdo se concretaría en una segunda reunión cuando los técnicos de Fedea y del IVIE hayan elaborado ya la propuesta de respuesta valenciana, para consensuar un relato conjunto que habría que enviar antes del 31 de enero. Mazón cree tener amarrado en su partido a nivel nacional que el criterio principal será el poblacional “porque es el que más gasto supone” ¿Y para convencer al resto? “Luego ya vendrán las compensaciones”, deslizó. De hecho, dijo que su parte del frente ya la tiene trabajada y habló de Andalucía y de Murcia como comunidades más afines. Por la posición del gallego Alberto Feijoo hubo que preguntarle. “No es un acuerdo contra nadie, ni contra Feijoo. Queremos un acuerdo que beneficie a todos y deje de perjudicar a la Comunitat Valenciana”, apuntó

Aseguró Mazón que la defendería “por delante” de sus compañeros de partido. ¿Estamos hablando de diputados nacionales valencianos votando sin disciplinas de partido? Pues ya veremos si llega el momento, dicen los populares. Ahora lo importante es unir fuerzas, primero dentro y después con aliados externos. Por su parte se ofreció a hacer de puente también con Pablo Casado.

Llegó el presidente del PPCV unos minutos antes de la hora fijada y salió una hora después para “lamentar la tardanza” en convocarle porque, según dijo, se ha perdido la oportunidad de grandes pactos presupuestarios. Un poco como los científicos que descubrieron el cometa. Por si a alguien se le había olvidado, recordó que había cogido turno el 15 de octubre, justo tras ser nombrado.

Presumió de capacidad de diálogo (exhibió su pacto en los presupuestos de la Diputación de Alicante con Compromís o de su incorporación a la ‘Taula per un finançament just’) y planteó a Puig medidas en cinco ejes y en las tres provincias. Aportó propuestas (puntos para hacer PCR y test de antígenos sin cita fuera de la atención primaria o la reserva de un 40% de los fondos europeos para empleo joven) y pidió dureza en la defensa del Trasvase Tajo-Segura. Mostró su apoyo en la candidatura a acoger las plantas de fabricación de baterías eléctricas y su oposición frontal a la tasa turística. Incluso se subió al tren de criticar las Cercanías aunque dijo que de reclamar las competencias nada de nada. Hurgó en la división botànica en la ampliación del Puerto y ofreció a sus europarlamentarios para pedir ayudar para el sector cerámico. Un poco de todo, incluido un apartado personalizado para la vicepresidenta Mónica Oltra y una critica a Puig por mantenerla como consellera de igualdad u políticas inclusivas tras la condena a su exmarido.

Desde la Generalitat se le dio perfil bajo a la reunión, tanto por la fecha (un día antes que la del presidente del Valencia Anil Murthy que la pidió el 11 de diciembre), como por la escueta nota de prensa con la que se solventó el encuentro inicialmente. Después, fuentes del Palau hablaron de un encuentro cordial en el que Puig escuchó las propuestas de Mazón y se comprometió a atender aquellas que favorezcan al conjunto de la Comunitat. Además recordaron su compromiso con una financiación justa, con el irrenunciable trasvase Tajo-Segura y con “una solución” que mejore el servicio de cercanías.