ALICANTE. Más de 90 organizaciones de la sociedad civil, empresas, bancos e inversores expresan su "profunda preocupación ante la propuesta de la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que conduciría a la tergiversación de los informes de sostenibilidad de las empresas de la UE".
La Comisión ha declarado que el aumento de la financiación sostenible es una prioridad fundamental. Para lograrlo es necesario acceder a información coherente y fiable sobre los resultados de las empresas en materia de sostenibilidad, lo que permitirá mejorar la transparencia y la comparabilidad.
"El Pacto Verde de la UE sienta las bases para una transición que haga avanzar la prosperidad, los intereses estratégicos y los objetivos climáticos de Europa. Debilitar el marco de presentación de informes de sostenibilidad socavaría el progreso, obstaculizaría el cumplimiento corporativo y la competitividad de las empresas europeas. En lugar de desmantelar estos marcos, instamos a la Comisión Europea a que dé prioridad a una implementación fluida, proporcionando a las empresas el apoyo que necesitan para prosperar y contribuyendo al mismo tiempo a los objetivos ambientales y sociales de la UE", según Mariana Ferreira, responsable de Políticas de Finanzas Sostenibles de WWF UE.
Los informes de sostenibilidad son una herramienta vital para las empresas, ya que les permiten gestionar los riesgos, identificar oportunidades e impulsar el crecimiento a largo plazo. La declaración destaca la naturaleza flexible y proporcional del marco y ofrece soluciones prácticas para hacer frente a los problemas de incumplimiento.
En un momento en el que los líderes europeos tratan de impulsar la competitividad y atraer financiación importante para apoyar la transición de las empresas hacia la sostenibilidad, el marco de información sobre sostenibilidad de la UE desempeña un papel clave en la protección del mercado europeo y en la igualdad de condiciones con los actores mundiales.
Los firmantes de la declaración piden a los responsables políticos europeos y nacionales que se centren en apoyar una aplicación inteligente y sencilla de las normas de la UE sobre memorias de sostenibilidad, en lugar de jugar al ping-pong con el marco jurídico.
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