ELCHE. Según explican desde Margalló, el pasado lunes, las trabajadoras de la empresa de restauración del CEIP Hispanidad volvieron a sacar a los contenedores situados frente al colegio las bolsas de basuras con restos orgánicos provenientes del comedor escolar del centro, tras cinco meses sin hacerlo. Dentro de la campaña “En el Cole Compostamos” de Margalló-Ecologistes en Acción, el colegio asumió el objetivo de transformar en compost todos los residuos orgánicos generados por el comedor a lo largo del curso, con la finalidad de concienciar a su comunidad escolar sobre la problemática de los residuos y el desperdicio alimentario. Ahora, tras este medio año transcurrido, desde el colegio han tenido que renunciar a seguir compostando, al resultar inasumible gestionar las más de cinco toneladas de residuos orgánicos generados en este tiempo.
“Tenemos más de cinco toneladas de residuos compostándose en diez composteras de gran capacidad y la previsión hasta fin de curso era de llenar al menos otras cuatro. Con los escasos medios materiales que contamos es imposible seguir adelante con el proyecto”, comenta Fernando Sáez, coordinador del comedor escolar y miembro del Margalló. “El Ayuntamiento nos ha facilitado parte de los restos de poda que necesitábamos para compostar, pero esa ayuda es totalmente insuficiente, se necesita maquinaria y un espacio adecuado como el que tenemos frente al colegio, en el Hort del Monjo, para instalar un punto de compostaje comunitario y que tanto el colegio como los vecinos de la zona puedan reciclar sus restos orgánicos”, agrega.
Extrapolando los datos obtenidos en el Hispanidad, desde Margalló-Ecologistes en Acció aseguran que, en base al número de colegios de la localidad con comedor escolar, podrían ser más de cuatrocientas toneladas de residuos orgánicos las que anualmente estuvieran acabando en el vertedero de Els Cremats, incumpliendo lo establecido en el vigente Plan Integral de Residuos de la Comunitat Valenciana en materia de biorresiduos.
Además, desde el colectivo ecologista afirman que ya en 2004, nuestro Plan Zonal de residuos establecía como objetivo para el 2010 haber establecido la recogida selectiva de materia orgánica de grandes productores locales, los centros escolares entre ellos, y que la propia administración autonómica ha tratado de incentivar, mediante diferentes órdenes reguladoras, la implantación de instalaciones de compostaje comunitario. “En nuestra localidad no se ha hecho absolutamente nada en materia de prevención en la generación de biorresiduos a pesar de la normativa existente”, afirma Manuela Campello, integrante también del Margalló y una de las colaboradoras en el proyecto del colegio Hispanidad. “ Las únicas iniciativas que ha habido en Elche en este tema han partido de colegios como el Hispanidad, que de la mano de unas pocas personas voluntarias, con pocos recursos y muchas ganas, han demostrado que, si se quiere, se puede. Ahora le toca a nuestro Ayuntamiento decidir si quiere o no”.