ALICANTE. La Asociación Mármol de Alicante se ha convertido en la primera entidad nacional del sector de piedra natural en obtener la autorización de gestor de residuos en operaciones de tratamiento R5 con la que podrá encargarse de valorizar y reutilizar el material procedente del corte y aserrado de piedra caliza mediante su uso en procesos de rehabilitación-restauración.
Portavoces oficiales de la asociación han precisado que la entidad colaborará con la Conselleria de Medio Ambiente, a través de la Dirección General de Calidad Ambiental, y ayuntamientos del Corredor del Mármol en la rehabilitación y restauración de áreas degradadas y huecos mineros con la aportación de la marmolina generada por la actividad industrial de elaboración de la piedra natural.
El presidente de Mármol de Alicante, David Beltrá, ha señalado que "gracias a la ayuda de la Dirección General de Calidad Ambiental, Conselleria de Medio Ambiente y al apoyo que nos han prestado los ayuntamientos del corredor del Mármol del Vinalopó, hemos logrado convertirnos en referente dentro del sector con capacidad de aprovechar nuestros residuos, la marmolina, en regenerar espacios naturales afectados por actividades mineras. Esto permite incidir en el proceso de economía circular y mejorar espacios deteriorados".
La asociación viene desarrollado desde 2013, proyectos concretos de relleno de antiguos huecos mineros con la marmolina, como parte de la apuesta de sus asociados por una industria respetuosa con el entorno y por la protección del medio ambiente. Este trabajó fructificó a finales de 2017 cuando finalizó la primera restauración integral de uno de estos huecos, concretamente la antigua cantera de yesos situada en el paraje de La Morachel en Novelda.
Ahora, con esta nueva autorización administrativa, la asociación se convierte en gestor del residuo, lo que conlleva una mayor implicación en el proceso. La intención de Mármol de Alicante es prestar sus residuos y su capacidad de gestión en el acondicionamiento de antiguos huecos mineros abandonados o espacios degradados por otros usos para constituir nuevos espacios naturales. Gracias a ello se generarán en el futuro suelos útiles y productivos con valor agrícola u otros usos, puesto que este material permite la regeneración natural de los espacios tratados.
Beltrá afirmó que "nuestro sector tiene un fuerte compromiso medioambiental, de absoluto respeto de nuestro territorio. Nuestra actividad también puede ser capaz de generar actuaciones de alto valor ecológico y constituir un buen ejemplo de la nueva economía, donde hay un aprovechamiento de los residuos y una segunda vida a materiales que, hasta la fecha no tenía uso alguno".
En esta línea, añadió que "esto supone un doble logro, por una parte, que el sector de la piedra natural puede valorizar los residuos de marmolina mediante su uso en procesos de rehabilitación-restauración; y por otro, recuperar para el medio ambiente y para la colectividad espacios degradados por antiguas actividades extractivas".