ALICANTE. "No está mal tirado". Es la respuesta de fuentes de Banco Sabadell a la petición de confirmación de que la entidad dejará la sede social de Alicante para volver a situarla en Cataluña. Años después de que el banco que preside Josep Oliu aterrizara su sede social en la ciudad de Alicante -en 2017- "por la reacción de clientes ante un determinado movimiento político", ahora el consejo se reunirá muy pronto para discutir y decidir el retorno de la sede social a Cataluña. Y es que, las mismas fuentes de la entidad bancaria aseguran que "siempre dijeron que se fueron porque las circunstancias no eran propicias" en 2017 con el clima del referéndum de independencia de Cataluña. Pero, al parecer "si ahora deciden volver es porque sí se dan esas circunstancias para estar" en territorio catalán. Y la ciudad que nombran para esa sede social no es Sant Cugat del Vallès, sino Sabadell.
A preguntas de este medio, la entidad afirma que el consejo se reunirá muy pronto y que "todo quedará muy claro", y han querido especificar que, aunque se marcharan "dejarán clara la importancia de la Comunitat Valenciana" para Banco Sabadell. Y han asegurado que, en cualquier caso, el cambio de sede social no es sinónimo de "afectación de oficinas ni de otras instalaciones" en Alicante. Afirman que la Comunitat Valenciana no debe tener "ninguna preocupación por ese cambio, quizá sea más importante.
Poniendo en contexto la más que probable marcha, en abril de 2024, Josep Oliu aseguraba que el cambio de sede social de Banco Sabadell "para nosotros, no está ni encima ni debajo de la mesa" el cambio de sede social. El presidente de la entidad hablaba en esos términos en el evento previo en el que Banco Sabadell rinde cuentas a sus accionistas en Alicante. Para Oliu, según sus palabras -en primavera del año pasado-, si en la ciudad alicantina está su sede social, también tienen también sedes corporativas en Sant Cugat del Vallés o Madrid. "Estamos repartidos por toda la geografía española. Aquí vinimos por un accidente, como una reacción nuestra a la reacción de clientes ante un determinado movimiento político. Para nosotros eso es neutral". Destacaba también que "una vez en Alicante no nos va mal y tenemos más presencia por nuestra parte en la provincia alicantina, que tiene la cuota de mercado más alta, igual que en Murcia y el resto de la Comunitat".
Pero, tal y como confirman desde Banco Sabadell, lo que les movió de Cataluña, ya no pesa y se dan las circunstancias para el retorno con vistan en Sabadell.
Eso fue antes de la opa que BBVA lanzó sobre Banco Sabadell en mayo de 2024 y que se encuentra en fase de análisis por parte de la CNMC y la CNMV. Una operación que, de llegar a buen puerto, supondría la fusión de varias entidades. Tanto el Gobierno español como el catalán - ambos liderados por el Partido Socialista - han mostrado su rechazo a la operación en reiteradas ocasiones.
En el mes de junio, Josep Oliu, protagonizaba un encuentro en la sede de Banco Sabadell en València, Alicante y Murcia en el que se reunía con instituciones públicas y asociaciones empresariales para recabar apoyos para Banco Sabadell frente a la opa de BBVA que busca esa operación entre ambas entidades financieras.
Con este viraje de Banco Sabadell, la respuesta política, social y de la patronal empresarial alicantina y valenciana no es de contento.
En la tarde del 21 de enero, antes de conocerse la noticia, el president de la Generalitat, Carlos Mazón, conversaba tanto con el presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, como con su consejero delegado, César González Bueno, quienes le informaron de la decisión de trasladar la sede social a Cataluña.
Desde el Consell han pedido que "la prioridad absoluta es garantizar el mantenimiento del empleo y el negocio de esta entidad financiera en nuestro territorio, así como el flujo del crédito a consumidores, pymes e industrias" y así, dicen, se le ha requerido a los representantes de Banco Sabadell.
Por su parte, el presidente del PP de Alicante y de la Diputación Provincial, Toni Pérez, ha reclamado que el regreso a Cataluña de la sede social de Banco Sabadell "no suponga ninguna merma en los servicios, los recursos, las oficinas ni en las condiciones y garantías laborales" de los trabajadores en la provincia y ha reclamado "que haya un compromiso firme, cuidadoso y de buen trato hacia la provincia de Alicante y para nuestro tejido social y económico".
Algunos de los términos más contundentes vienen desde el alcalde de Alicante, Luis Barcala. "Me siento profundamente defraudado por esta decisión", ha asegurado. Y afirma que "no entiende" los motivos ni "comparte" la marcha de la sede social de Banco Sabadell de Alicante.
Barcala ha asegurado que "la entidad vive un momento muy delicado y de sobra conoce la sensibilidad e identificación de los alicantinos con la antigua Caja de Ahorros del Mediterráneo, que fue absorbida por el Sabadell. Llevarse la sede a Cataluña no lo entiende ningún alicantino".
El presidente del Instituto de Estudios Económicos de la Provincia de Alicante (Ineca), Nacho Amirola, ha manifestado que "es evidente que no es una buena noticia para Alicante. La sede de un banco tan relevante como Banco de Sabadell es un gran atractivo para nuestra provincia, no solo por lo que representa la entidad en sí, sino porque es un gran polo tractor de inversión y empleo". El presidente de Ineca ha enfatizado que espera que "en ningún caso, Banco de Sabadell deje de apostar por Alicante tanto a nivel operativo y tecnológico como social, la provincia de Alicante se ha convertido en su casa y a todos nos gustaría que lo siguiera siendo".
Por su parte, el presidente de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), Salvador Navarro, ha declarado que, "si bien respetamos plenamente la autonomía de las empresas para tomar decisiones estratégicas que consideren beneficiosas, no podemos obviar que este traslado representa una pérdida significativa para la Comunitat Valenciana". Navarro, además, ha destacado que Banco Sabadell Sabadell "ha contribuido de manera importante al desarrollo económico local" durante estos siete años. No le gusta esta decisión a Navarro.
Por otra parte, CaixaBank asegura que no estudia regresar a Cataluña tras la decisión del Sabadell. "Nuestra sede está en Valencia con carácter indefinido" y ese escenario "no está bajo revisión", aseguraban ayer por la noche a EFE fuentes de la entidad.
Banco Sabadell reunirá muy pronto a su consejo para decidir sobre el retorno de su sede social a Cataluña. Por el momento, desde la entidad aseguran que cuando tomen la decisión "todo estará muy claro". Además de la sede social en Alicante, que ya pende de un hilo finísimo a punto de soltarse, la ciudad cuenta con el centro de datos de Banco Sabadell en Agua Amarga. En los últimos años, Banco Sabadell se ha posicionado como entidad financiera de referencia en la Comunitat Valenciana, y han presumido de "una clara apuesta por Alicante como centro neurálgico en la toma de decisiones y la consolidación del Centro de Competencias Tecnológico como centro de referencia en innovación tecnológica" y con un "firme compromiso en la colaboración interinstitucional", que, afirmaban, estaban dispuestos a consolidar.
Desde la entidad aseguran que no corren peligro oficinas ni instalaciones. Banco Sabadell cuenta con 211 oficinas en la Comunitat Valenciana -132 Alicante, 61 en Valencia y 17 en Castellón-. En cuanto a plantilla, es de unas 1.160 personas. Cabe ver por dónde irán los próximos pasos. Sobre la opa, entre las novedades más significativas es que BBVA modificó la condición de aceptación mínima de la opa que quiere lanzar sobre Sabadell de alcanzar un 50,01% del capital social, condicionada a alcanzar "más de la mitad de los derechos de voto efectivos", lo que excluye la autocartera de Banco Sabadell en el momento en el que termine el plazo de aceptación de la oferta.
Se abren varias vías interesantes en las próximas semanas para conocer el futuro de Banco Sabadell y de cuál será su relación con la provincia alicantina.