Besugos putrefactos en las orillas y pavos ahogados contra los barrotes de la Navidad. Un servidor, ante la ultracampaña abstencionista de la derecha de pantalla, papel, red y demás espontáneos a sueldo y para llevar la contraria, aunque no tengamos solución como especie, piensa ir a votar rojo con alegría. Y como uno no es un conspiranoico que siente que todo está pre-escrito y dedicido por la mano oculta de la Sra. Ana Patricia Botín, Marc Zuckergberg, el grupo Bildeberg, el dinero oculto del Vaticano, la masonería internacional, Brad Pitt, Michelle Obama el IBEX, Steven Spielberg, el FMI, Annelynne McCloud, Andrés Velencoso y Nostradamus, le estimula, le divierte ir a votar el 10N con verdadero entusiasmo, entrega sin límites y, eso sí, con un final inevitable: ¿echamos otro?. Uno prefiere votar en ayunas, estado etílico, comulgado, en descomposición o en pleno arranque follatriz a la ilustre e inteligente izquierda española que tantísimo se y nos quiere. Una historia de polvito fugaz -ils se sont trouvés au bord du chemin- en medio de la nada: Une belle histoire de Michel Fugain. Pablo y Pedro. Las cosas suceden. La luna se aburre de darle vueltas al planeta mientras mira de reojo el infinito que queda a su espalda. Nacemos. Morimos. Lawrence Durrell escribió el Quinteto de Alejandría para describirnos la entropía de la humanidad, Josep Pla lo hizo en tres páginas. Joan Fuster en una frase. Vicente Blasco Ibáñez necesitó toda una obra. Miguel Hernández, una palabra. Frente a la inevitable desaparición tenemos el voto que vale el mismo peso que el del señorito. Un sufragio universal que conseguimos antes de ayer. Creo que hasta Franco ya había subido a los infiernos de la historia. Su nieto Luis Alfonso de Borbón es amigo íntimo de Santago Abascal. Y Matteo Salvini. La empresa de Aznar y Botella gana 100.000 euros pese a no facturar nada. Arroz con cosas.
Mañana el Pare Camps levitará sobre la Audiencia Nacional para firmar la recepción del auto por el que seguramente -dios lo permita por el bien del Viejo Testamento de la jerarquía celestial popular- se le condenará. Felipe González declara que no es cristiano y no le gusta hablar de culpas sino de responsabilidades. Y añade que todos lo somos. Después de satiguarme y rezar cinco padrenuestros de rodillas y medio intentando elevarme, caigo que eso suena a verdad bíblica, como la literatura mística de tradición judía de Santa Teresa de Jesús. Pero duele el reparto de duelos y quebrantos porque unos tienen más méritos que otros en el desastre actual. La Cábala y Las Moradas del Castillo Interior. Aquí abajo el agua llega a la cintura. La riuada en la Vega Baja ha desenterrado la basura sepultada a precio de oro en los campos y en la marjal. La abstención es el arma de la derecha. Fenoll y Ripoll. Los vecinos despiden bailando Baby Shark entre aplausos a la UME. El futuro político -también las próximas elecciones en la nostra terreta- se juegan en la Vega Baja. Una lluvia de millones. Burocracia y mosquitos. Una verdadera Gota Fría.
Ximo Puig quiere aislar y proteger el Botànic 2 del 10N. Que se ha cruzado con las elecciones internas de los partidos indígenas. Isabel Bonig se postula para lideresa com un bou embolat muy despegada de la colla i tot el comboi de Pablo Casado. Palabra de Margallo. Te alabamos, Señor. La influencer Eva Ortiz, oriolana, evaporada en pleno diluvio con su cuchillo en Afganistán, reaparece estupenda, divina de la muerte, impoluta en el spa de Les Corts junto a Pepe Císcar. Qué guapo. Mónica Oltra se juega su supervivencia a la valenciana. Ser la sustituta de Joan Ribó como alcaldesa del cap i casal empujada por los jóvenes esenios capitaneados por el volátil liderazgo del Bloc -compañeros, tiempo y resultado- Fran Ferri, Àgueda Micó y los arzobispos y monaguillos denisovanos comarcales. O quedarse para vestir santos en el olimpo de Iniciativa. Joan Baldoví prefiere -el olfato de la M30- lo de Errejón. Manuela Carmena se conforma con un reconocimiento. Un ministerio, no sé, unas 3 magdalenas o una misión internacional. Cantemos al amor de los amores. Podemos camina irremisiblemente -aquí suena a tota virolla Gloria Gaynor cantando con Rafaella Carrà I Will Survive- hacia la extinción. O la adaptación. El mundo Malú. La pasta del Fla. Letizia Ortiz, la nieta del taxista de San Gabriel, viene el miércoles al barrio de Carrús a inaugurar oficialmente el curso de Formación Profesional. Imperdible.
Luis Barcala se ha desvanecido en la bruma de septiembre. Un bajonazo soberano. Mari Carmen Sánchez no ejerce ni el en el pleno. Mari Carmen de España reza por la emergencia climática y la noche violeta a la Santa Faç. Paco Sanguino es una cabeza romana, una máquina de ideas, entretelas y trabajo. Pero no acaba de arrancarse e invitarme a cenar con velitas y micrófonos incorporados en el restaurante del Real Liceo Casino que lleva la supertodo Elsa Martínez. Alfa y Omega, el axis mundi del más allá del dinero alicantoniano. Esos ricos que nunca aparecen en escena o se marcan una batucada. Por el humo se sabe donde está el fuego. Nerea Belmonte acaba de -la asistenta para todo- repasar con el mocho el último rellano, lee este párrafo en su smartphone Oppo-Find X Lamborghini, guarda silencio medio microsegundo y pide una pizza 4 quesos. Natxo Bellido anda secuestrado por Natxo Bellido. Xavi López, de Podem, ordenado y sagaz, termina de aterrizar en un agujero negro. Adrián Ballester encumbra a Carlos Mazón en la FEMP. Fernando Sepulcre quiere ser el director del Teatro Principal.
Las moreras se doblegan azotadas por el viento. Las trincheras, embarradas, casi invisibles, vuelven al secreto de la cicatriz del silencio. El sátelite pasa puntualmente. Repican las campanas de Gaibiel. En medio de la noche oscura brilla la sierra Espadán. Inmaculada De la Concepción sueña y entrevista en directo a su conciencia. Hace café. Mi nunca bien ponderado ni pagado Herr Direcktor Miquel González me echa otra bronca del copón. No le ordeno bien la actualidad. Las niñas suben felices berreando. Me lanzo al agua. El mundo es maravilloso.