ELCHE. Madeinplant -empresa de base biotecnológica y spin off de la Universitat Politècnica de València (UPV) y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC)- y la Universidad Miguel Hernandez (UMH) han firmado un convenio para introducir innovaciones tecnológicas en las variedades tradicionales de tomate Muchamiel y de Pera.
En concreto, el equipo de Madeinplant y la UMH generará variantes de color y composición nutricional conservando todas las características de producción, forma y tamaño de fruto, carnosidad etc. que caracterizan a estas variedades tan apreciadas localmente. "De esa forma, el productor podrá ofrecer un abanico más grande de diversidad utilizando las mismas condiciones y prácticas de cultivo a las que está acostumbrado con las variedades tradicionales y, por otra parte, el consumidor se podrá beneficiar de unos tomates con una diversidad de colores y composición nutricional en su variedad favorita", destaca Antoni Granell, socio fundador de Madeinplant e investigador científico del CSIC en el Instituto de Biología Molecular y Celular de Plantas (UPV-CSIC).
Madeinplant es una empresa del sector agrobiotecnológico que dispone de tecnología propia que le permite introducir mediante nuevas técnicas genómicas (NGT) cambios dirigidos en diferentes cultivos manteniendo el resto de las características de las variedades tradicionales.
Por otra parte, el grupo de Biodiversidad Agrícola y Mejora Genética de Variedades de la Escuela Politécnica Superior de Orihuela de la UMH, dirigido por Juan José Ruiz y Santiago García, lleva años trabajando con variedades tradicionales de la zona de la huerta de Alicante y de la Vega Baja, como la variedad Muchamiel y de Pera.
Recientemente han desarrollado líneas de tomate Muchamiel y de Pera con resistencia genética a virus: a través de técnicas de mejora asistida mediante marcadores, consiguieron tomates más resistentes a algunas de las virosis más importantes que afectan al tomate en el sureste de España, como son: el virus del mosaico (ToMV), el virus del rizado amarillo (TYLCV) y el virus del bronceado (TSWV).
"Ahora, con este nuevo proyecto, partiendo de estas variedades tradicionales resistentes, se pretende obtener otras que mantengan la calidad gustativa y que presenten composiciones nutricionales mejoradas, así como una llamativa gama de colores, características todas ellas muy demandadas por el mercado actual", concluye Santiago García, del grupo de Biodiversidad Agrícola y Mejora Genética de Variedades de la EPSO-UMH.