VALÈNCIA (EFE). Valencianos y gallegos, y también los ceutíes, afrontan el regreso de las vacaciones de verano con menos festivos en el calendario que los demás españoles, mientras que si se suman los festivos locales a los autonómicos, los ovetenses son los mejor parados.
El calendario laboral del último cuatrimestre del curso no se presenta de la misma forma para todos los españoles porque existen diferencias entre las distintas autonomías.
Así lo ha puesto de manifiesto la polémica desatada en Castilla y León, donde el Ejecutivo autonómico, en una iniciativa liderada por Vox, ha planteado cambiar el calendario laboral para trasladar el festivo del 2 de enero al Día de Santiago (25 de julio).
De hecho, y limitando el cálculo a 2022, la primera diferencia entre los distintas autonomías vendrá marcada por cómo compensa cada comunidad el hecho de que, este año, 24 y 25 de diciembre caigan en sábado y domingo.
Toda España celebra los cuatro festivos nacionales en los meses que restan para que termine 2022: el 12 de octubre, Día de la Hispanidad; el 1 de noviembre, Todos los Santos; el 6 de diciembre, la Constitución; y el 8 de diciembre, la Inmaculada Concepción.
Pero no todas las comunidades harán festivo el lunes siguiente a Navidad: la Comunitat Valenciana y Galicia no lo harán.
Tampoco País Vasco y Ceuta. Los primeros lo compensarán con un festivo propio, el Día de Elcano (6 de septiembre). La ciudad autónoma de Ceuta celebrará su día el 2 de septiembre, aunque este año será laborable, por lo que los ceutíes se suman por la cola a valencianos y gallegos.
Las diferencias crecen si a los festivos nacionales y autonómicos sumamos los locales, que en algunos casos afectan a millones de personas, como es el caso de la Almudena, en Madrid (9 de noviembre) o Barcelona, con la Mercé (26 de septiembre).
El calendario de 2022 ha hecho coincidir varios festivos autonómicos con jornadas que ya de por sí no eran laborables. Es el caso de los valencianos; la fiesta de su comunidad, el 9 de octubre, cae en domingo.
Y así ocurre también con el Día Nacional de Cataluña del 11 de septiembre, que se cae de la lista de fiestas, y con el Día de Navarra (3 de diciembre, sábado) o el de Melilla (17 de septiembre, también sábado)
No sucederá lo mismo con el 8 de septiembre, Día de Extremadura y Día de Asturias, que se celebrará en jueves. De este modo, los ciudadanos de Oviedo, que celebrarán además el 21 de septiembre, Día de San Mateo, tendrán un reinicio de curso algo más ligero que el de muchos otros, porque suman además el 26 de diciembre.
Tampoco salen mal parados los cántabros, que celebran el 15 de septiembre la Festividad de la Bien Aparecida. Por su lado, los pamplonicas cuentan con la fecha de San Saturnino, el 29 de noviembre, y además también con el 26 de diciembre.
El 8 de septiembre es así mismo el de la patrona de Melilla, lo que compensa su chasco del 17 de septiembre. Además, su 26 de diciembre, a diferencia de Ceuta, sí será festivo por ser el siguiente al Día de Navidad.