Un operario en el Colegio Público Manjón Cervantes. Foto: APALICANTE. El embargo de los pagos municipales a la empresa que presta el servicio de limpieza de dependencias públicas ya ha disparado las alertas entre sus empleados. Representantes del comité de empresa de Ortiz e Hijos precisaron a Alicante Plaza este martes que la retención de esas facturas ya está provocando preocupación entre buena parte de la plantilla (420 operarios) ante el temor a que acaban sufriendo sus consecuencias en forma de retraso de nóminas o, directamente, de impagos.
Hasta ahora, según las mismas fuentes, todos los empleados vienen percibiendo sus retribuciones mensuales sin ningún problema. Es más, la gerencia de la compañía les habría garantizado que este mismo día 15 percibirían la paga de beneficios que les corresponde y que, al menos por ahora, no habría nada que llevase a pensar que pudiese suspenderse el abono de los sueldos en lo sucesivo.
Respecto al nuevo pliego aprobado en Junta de Gobierno este martes, las mismas fuentes precisaron que no podrán valorarlo hasta conocerlo en detalle. "La clave es comprobar cómo han quedado redactadas algunas de las peticiones que trasladamos al equipo de Gobierno y que se comprometieron a incorporar", insistieron. Los representantes de los trabajadores llegaron a convocar paros en diciembre en señal de protesta contra los términos del primer concurso convocado por el tripartito. Esa amenaza de huelga llevó al equipo de Gobierno a retirar el concurso y a plantear unas nuevas bases con la vocación de asegurar, en la medida de lo posible, la continuidad de los puestos de trabajo.
El nuevo pliego establece un precio de licitación de 18 millones por dos años, prorrogables en otros dos. El 65% de los puntos se concederán en base a criterios objetivos de valoración.
