Instalaciones de Agrícola Villena en la localidad alicantina, en una imagen de archivo. Foto: PEPE OLIVARESVILLENA. Nuevo paso hacia la puesta a punto de la antigua cooperativa Agrícola Villena, hoy SL. La junta de socios ha aprobado la operación acordeón para compensar las pérdidas acumuladas, sanear el balance y reforzar los recursos de la empresa. Con este movimiento, el fondo ProA tiene luz verde para inyectar 5 millones de euros en recursos propios en los próximos años. Así, según aprueba la junta general ordinaria de socios el 21 de noviembre en Villena, se lleva a cabo una reducción a cero del capital social para compensar pérdidas, y una ampliación al mismo tiempo, tal y como ya ha contado este diario.
En concreto, tal y como se expone en el Boletín oficial del Registro Mercantil, se ha reducido el capital social a cero para restablecer el equilibrio patrimonial y un simultáneo aumento del capital social en la suma de 119.575 euros a través de la misma cifra de nuevas participaciones sociales de un euro de valor nominal. Además, la prima de asunción total es de 4,96 millones de euros a razón de 41,54 euros por cada nueva participación creada y con previsión de suscripción incompleta. Así, el importe total del aumento de capital ascenderá a más de 5 millones.
Con la aprobación de esta operación, al crearse el mismo número de participaciones que las existentes antes de la reducción de capital, todos los socios pueden asumir el mismo número de participaciones. Las nuevas participaciones asumidas y desembolsadas otorgan los mismos derechos políticos y económicos y el plazo del derecho de asunción preferente es de un mes.
En agosto de 2022, ProA Capital cerró la adquisición de la cooperativa Agrícola Villena, tras varios meses de negociaciones desde junio, cuando anunció el inicio de las conversaciones para hacerse con una entidad que en enero llegó a solicitar medidas de regulación de empleo para su plantilla.
El fondo ya anunciaba un plan de inversiones diseñado por el nuevo equipo directivo que contemplaba la modernización de las instalaciones, así como la inversión en líneas para el procesamiento de nuevos productos. Según sus previsiones, las inversiones superarán los 10 millones de euros en los próximos años. Adicionalmente, se incorporaba un nuevo equipo directivo proveniente de la industria agroalimentaria con el objetivo de reforzar al equipo existente y poder implementar sistemas de mejora continua y gestión de procesos.
Además, a finales de julio, sindicatos, comité de empresa y la firma trabajaban y negociaban para encontrar un acuerdo que fuera satisfactorio para las exigencias del nuevo fondo y también para la plantilla de la excooperativa.
Se pedía, como ya adelantó este diario, una estructuración de la compañía con la que prescindir de 100 trabajadores. Con el fin de que no se convirtieran en un centenar de despidos en la empresa, proponían que 70 de esas personas se presentaran voluntarias a transformar su situación en la de fija discontinua - con compensaciones de varios tipos que está negociando el comité de empresa- y 30 despidos. Los trabajadores en asamblea dieron el visto bueno a un preacuerdo en el que se fijaban las condiciones laborales ante la futura entrada de ProA.
