ALICANTE. Que todas las derrotas estén acompañadas de pinchazos de los rivales directos...
El Eldense jugó el sábado un mal partido ante el Mirandés de Alessio Lisci. Despertó tarde porque su reacción no le dio para sumar en su visita a un conjunto que en lo que llevamos de curso liguero se ha confirmado como inferior al azulgrana. También se le hizo tarde a los hombres de Fernando Estévez en Tenerife, pero a este equipo no cabe situarlo un escalón por debajo del que ocupa el Eldense, no obstante contar ahora mismo con un punto menos que los azulgranas.
El caso es que la derrota encajada el sábado no ha tenido consecuencias para el Eldense en la tabla, toda vez que a la finalización de la jornada 30 mantiene los mismos 11 puntos de colchón con respecto al descenso que tenía la jornada anterior, la mayor ventaja de la que han disfrutado en lo que llevamos de curso respecto a una zona roja dentro de la que llegó a estar en la jornada novena. Lo anterior porque ninguno de los equipos que arrancaban la misma en descenso ha ganado; es más, tres han perdido y solo uno, el Alcorcón, sumado un punto.
El próximo viernes el Eldense recibirá en el estadio Nuevo Pepico Amat a un rival directo, un conjunto que llegó a estar prácticamente desahuciado en su momento, pero ahora arrancará la jornada 31 con un colchón de cuatro puntos respecto al descenso: el Cartagena. Los albinegros ganaban este fin de semana al Racing de Ferrol, rompiendo una mini racha negativa de dos derrotas consecutivas y recuperando posiciones en la clasificación de la segunda vuelta, hasta el punto de que ahora son el segundo mejor conjunto en la misma, solo superados por el Elche. El equipo de Julián Calero ha sumado 19 de los 27 puntos puestos en juego en la segunda mitad del curso, solo uno menos que el de Sebastián Beccacece, pero solo cuatro más que el Eldense que, conviene tenerlo presente, ganó en el Municipal Cartagonova en la primera vuelta. Son siete los puntos que separan a azulgranas de albinegros cuando restan 36 por ponerse en juego.