ELCHE. Sigue sin clarificarse cuál será el devenir de las cuentas municipales de 2019. El tripartito sigue negándose a sacar adelante una bajada del IBI del 6,5%, bajo el pretexto de que supondría recortes sociales y menos inversión. Y todo pese a que la concejalía de Hacienda ha dado a conocer que se han recaudado 13 millones más de lo previsto, algo que desde Ciudadanos piensan que compensaría la bajada para el próximo año, que supondría dejar de ingresar 5 millones. Por su parte, el Partido Popular cree que el PSOE da la legislatura por terminada.
Algo a lo que alude el portavoz Pablo Ruz porque en la Comisión de Hacienda previa al pleno no hay información alguna sobre la propuesta de tasas, precios e impuestos para 2019 que en teoría el tripartito presentaría en noviembre. "El tripartito sigue sin querer cumplir con su obligación de presentar unos presupuestos para el año que viene. Cada vez más en sintonía con el gobierno de Pedro Sanchez", esgrime Ruz, trazando un obvio paralelismo. Desde su formación siguen pidiendo explicaciones ante este retraso, que aseveran "muestra la paralización del gobierno". En cualquier caso, se ponen a su disposición para llegar a acuerdos sobre las cuentas.
El tripartito no está por la labor obviamente, como tampoco lo está por bajar el IBI, como volvió a recordar ayer ante una intentona más de la formación liderada por David Caballero. Si bien a principio de año se habían previsto ingresar por este impuesto 57 millones de euros, efinalmente serán 70, por lo que hay 13 millones de euros que los naranjas utilizan como argumento para la bajada: “una inyección económica extra que destapa las mentiras del alcalde, que no quiere bajar uno de los impuestos más caros de España”. A su juicio, esta recaudación deja "sin coartada" al equipo de gobierno, al haber "dinero más que suficiente para bajar el IBI sin excusas", estiman.
Con todo, no habrá tal bajada, que el tripartito defiende que es regresiva al ser testimonial para las rentas más bajas y más importante para las más altas. De hecho, esperan poder sacarlos adelante en diciembre. O al menos presentarlos, ya que no podrían salir salvo por arte de magia, o que Ciudadanos pasase a abstenerse, aunque no es lo lógico si su amenaza de votar en contra si no hay bajada del IBI va en serio. Salvo que haya algún acuerdo por lo bajini o un as bajo la manga que el tripartito no ha hecho público, ya que sólo se limita a decir que no permitirá tal bajada, como hace semanas, todo indica a que se irá a una prórroga de los presupuestos. La misma fórmula de la que se podría servir Pedro Sánchez si finalmente no obtiene los apoyos suficientes. A fin de cuentas, es una opción posible, al menos para sobrevivir hasta las elecciones de mayo, donde la aritmética puede cambiar las tornas. No sería raro, dado que el propio equipo de gobierno ya ha realizado más de una treintena de modificaciones presupuestarias a lo largo del presente curso.