BENIDORM. Los hoteleros de Benidorm son optimistas ante el primer examen turístico de 2022: la Semana Santa. El presidente de la patronal hotelera de la Comunitat Valenciana, Toni Mayor, explicó a Alicante Plaza que las reservas de momento van muy bien, siempre a expensas de que no haya nuevos sustos que las hagan tambalear. Los frentes que han surgido en los últimos años no son pocos: una pandemia que ha limitado la movilidad que tan grande se había hecho en el mundo y ahora una guerra que ha movido los cimientos de la seguridad, sobre todo en Europa.
Sobre esto último, el empresario explicó que aunque ha tenido algo de incidencia porque obviamente no hay turistas procedentes de Ucrania en estos momentos. En lo que más se está notando es en los efectos secundarios que está teniendo para la economía, con el incremento de costes y la escasez de materiales, que entre otros asuntos, está retrasando las reformas de los edificios.
Pero como se decía, las reservas van a buen ritmo y esperan que se puedan repetir los números que se hicieron antes de la pandemia, hace ya tres años. Cabe recordar que en el 2020 la Semana Santa ya llegó con la población confinada en España. Desde entonces, las reservas de última hora han jugado un buen papel siendo más altas que los años previos a la crisis sanitaria. Por ello, esperan que la predicción del tiempo sea un factor determinante para que la ocupación siga subiendo hasta colgar el cartel de completo hasta dentro de menos de dos semanas, que es cuando se celebran estos días religiosos.
Durante la Semana Santa se espera que estén la mayoría de los hoteles abiertos, una situación que no se da desde 2019. Solo quedarían por levantar la persiana aquellos que siguen de reforma, según dijo Toni Mayor. En este sentido, muchas son las cadenas que han ido comunicando en los últimos días su apertura en la capital de la Costa Blanca. Los últimos han sido desde Meliá Hotels International y Magic Costa Blanca. El primero ha comunicado que necesita más de 350 trabajadores para los puestos vacantes que tiene en sus cuatro hoteles de la ciudad: Meliá Villaitana, Meliá Benidorm, Sol Pelicanos Ocas y Sol Costablanca.
Por lo que respecta a Magic, la compañía local ha informado que en la actualidad tiene cinco de sus hoteles abiertos, a lo que se sumarán otros tres en Benidorm a partir del 1 de abril, y el 29 de abril será el momento para el resort de naturaleza Magic Natura. Ambas cadenas siguen la línea de Mayor, señalando las buenas expectativas que tienen para este periodo vacacional. EN palabras del vicepresidente ejecutivo de Magic, Javier García, :“Confiamos en que abril sea el mes de la reactivación del turismo y del empleo".
Desde Meliá confirmaron una progresiva recuperación de la demanda hacia sus hoteles de Benidorm, donde espera recuperar este verano unas tasas de ocupación similares a las de 2019 e incluso con incremento de precio medio.
"En líneas generales, no estamos mal" para Semana Santa, explica Mayor, que prevé que haya en torno al 35% o más de mercado británico para esas fechas del total de los turistas en Benidorm. El rey para estos días sigue siendo el nacional por ser festivo en el país. Así, recordó que los días importantes de venta para los turoperadores británicos ya han pasado, por lo que las previsiones para este mercado suelen variar poco y los hoteles se pueden hacer una idea de sus aperturas.
Como decía Mayor, algunos de los hoteles no llegarán a abrir para Semana Santa. En algunos casos, el problema viene incluso por la huelga de transportistas debido a las consecuencias de la guerra de Ucrania. El propio empresario explica que ha tenido problemas para seguir una de sus obras, el hotel Port Alicante Playa de San Juan, porque no les llegaba hormigón.
A colación de esto, también pidieron este lunes que entre en consideración el Imserso dentro de las medidas que va a aplicar el Gobierno para hacer frente a la subida de costes. Según los informes económicos y los cálculos realizados por la asociación, en 2020 este programa acumulaba un desfase de un -25% sobre el precio de producción. En diciembre de 2020 se estimó que producir una pernoctación del Imserso costaba entre 27 y 33 euros de media, 27 euros solo coste operativo de producción, que se eleva a 33 euros si se tiene en cuenta los costes de estructura. Sin embargo, el último pliego estableció que la retribución a los hoteleros españoles que participen en este programa sea de 22 euros.
Ahora, el encarecimiento de la energía, de los alimentos y las revisiones que se han tenido que hacer en los convenios colectivos del sector, o que están en curso de negociación, suponen que producir una pernoctación hotelera se haya incrementado al menos un 20%, según los cálculos de Hosbec.