Una grúa en plena descarga de graneles en el Puerto de Alicante. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. Los conservacionistas no comparten la perspectiva que la Autoridad Portuaria trasladó este miércoles ante su consejo de administración sobre la puesta en marcha de las medidas antigraneles exigidas por la Conselleria de Medio Ambiente y sobre el aval conferido por la consultora homologada ECMCA, en un informe fechado el 21 de agosto. Portavoces de Ecologistas en Acción (uno de los colectivos más combativos contra las emisiones a la atmósfera que puede llegar a generar la carga y descarga de materiales pulverulentos en los muelles de Poniente) señalaron este jueves que gran parte de esas exigencias no se ciñen realmente a los requisitos que figuran en el permiso autonómico, por lo que instaron tanto a la Autoridad Portuaria como al departamento que coordina Elena Cebrián a ser rigurosos para que se garantice su cumplimiento.
Las mismas fuentes, admitieron que es cierto que ya se difunden las mediciones captadas por las estaciones de control del entorno portuario en la la Red Valenciana de Vigilancia y Control Atmosférico (RVVCCA), como publicó Alicante Plaza. Sin embargo, denunciaron que al menos una de esas cuatro estaciones de control, la instalada en el muelle 19 (según la Autoridad Portuaria, preexistente) no proporciona datos porque en realidad no funciona y no ha funcionado nunca. Además, incidieron en que esas estaciones de control debían estar en funcionamiento el 21 de mayo y no el 21 de agosto, como ha sucedido.
Pero no sólo eso. En esta línea, apuntaron que los muros-pantalla que deben impedir la propagación de partículas al ambiente no tienen la altura requerida y, además, no están dispuestos en forma de 'U' para que realmente tengan eficacia. Señalaron que, de acuerdo con sus propios análisis (con muestras de polvo recogidas en los balcones de edificios del entorno del Puerto), se observa la presencia de escorias: un material pulverulento que no estaría contemplado en la autorización.
Los conservacionistas sostienen que una de las estaciones de control no funciona, que las pantallas no están dispuestas en forma de U y que se ha superado el nivel legal de emisiones
Y, sobre todo, recalcaron que, a partir de los datos difundidos en la red de vigilancia de la Generalitat, sí se ha superado en varias ocasiones a lo largo de este mes de septiembre el umbral límite de emisiones de partículas permitido por la legislación (50 microgramos por metro cúbico como media diaria), como sucedió, en concreto, el pasado 8 de septiembre (según los datos captados por el medidor del tinglado frutero, con un valor de 82).
Esa acumulación de circunstancias, según el colectivo, invitaría a no caer en presuntos triunfalismos, por lo que, según sus portavoces, se confía en que Medio Ambiente sea exhaustivo y no dé por cerrado el expediente informativo que se abrió a mediados de julio.
Fuentes de la conselleria consultadas por este diario precisaron que, en principio, la apertura de ese expediente no se justificaba sólo en el supuesto retraso en la implantación de las medidas correctoras, sino también en la superación de determinados valores de emisión que se registró en algunos episodios puntuales. Por ello, apuntaron que se prevé que el expediente continúe en trámite hasta que se certifique si ha habido una evolución favorable y ya no existen esos picos.
