Los comedores escolares adoptan tendencias saludables con cocina casera, local y sostenible

ALICANTE. El 28 de mayo se celebra el Día Mundial de la Nutrición, una iniciativa apoyada en nuestro país por profesionales, médicos y colectivos como la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética con un objetivo claro: concienciar sobre la necesidad de mantener una dieta equilibrada que permita el correcto funcionamiento entre cuerpo y mente aumentando nuestro bienestar.

Durante estos días, son múltiples las actividades que se realizan a lo largo y ancho del mundo, algo a lo que se unirán también los colegios El Limonar International School de Murcia y Villamartín (San Miguel de Salinas) con el foco en que los alumnos comprendan la importancia de una buena nutrición.

Para Soledad Pina, directora de ELIS Villamartín, “la evidencia sugiere que, además de afectar a nuestra salud física, lo que comemos afecta a cómo nos sentimos. En ELIS el bienestar global de nuestros alumnos es una prioridad y por ello para promover la alimentación sana se crean oportunidades de aprendizaje transversal en el aula, mediante actividades manipulativas o lecciones a lo largo del curso dentro de la asignatura de Desarrollo Personal, Social y de la Salud. También potenciamos eventos que promueven los hábitos de alimentación saludable tales como un quiosco de comida sana liderado una vez al año por el propio Consejo de Alumnos o nuestra Competición de Almuerzos Sanos”.

Alcanzar el equilibrio y la constancia en una alimentación saludable es algo que se consigue con continuidad, y qué mejor manera de hacerlo que predicando con el ejemplo durante todo el año en el lugar donde los estudiantes realizan gran parte de sus comidas: el comedor escolar. “En ELIS tenemos una doble prioridad: servir comida saludable y que a los niños les guste. Saludable porque una experta nutricionista supervisa cada menú. Rica porque son recetas sabrosas en las que incorporamos todos los productos frescos y locales posibles, lo que tiene un impacto innegable en el sabor”, asegura David Muñoz, chef de ELIS Murcia.

“Nuestro producto cárnico siempre es fresco y siempre nacional, y nuestros proveedores deben cumplir unas exigencias muy elevadas para trabajar para nosotros. Valoramos mucho la huella de carbono que generan y muchos han incorporado fuentes de energías renovables, fundamentalmente mediante placas solares, a todos sus procesos. Otro de los requisitos que les marcamos es que el producto que nos facilitan venga en envases reutilizables. Por ejemplo, nos traen mercancía en cajas que apilamos y las retiran para volvérnoslas a llenar. En los momentos óptimos del curso escolar, en torno al 65% de los productos de todo nuestro menú es local. No bajamos nunca del 40%. Esto nos permite contar con un buen producto para la elaboración de nuestra comida 100% casera”, explica.

Además, en ELIS cuentan con una asesoría externa exclusivamente especializada en sostenibilidad. “Ayudamos a nuestro colegio a reducir sus emisiones mediante el reciclado de residuos (aceites, etc.), así como al correcto tratamiento de las basuras. En nuestro servicio de comedor no se emplea nada de vidrio ni de plástico, por ejemplo. Hasta la poca agua embotellada que debemos usar en algunos eventos, oficinas, etc. viene en formato tetra-brick”, comenta Muñoz.