Las nuevas aperturas y el turismo desplazan el polo gastronómico del centro hacia Gabriel Miró

ALICANTE. Las nuevas aperturas de locales hosteleros en el entorno de la plaza Gabriel Miró, y especialmente en la calle Manero Mollà, no solo han revitalizado la zona como lugar de ocio, sino que han desplazado el polo gastronómico del centro de Alicante hacia este eje. Así, si hace solo unos años los nuevos locales y el foco del sector estaban puestos en el entorno del Mercado Central y el principio de la calle Castaños (al calor del 'tardeo'), el interés de los inversores y el empuje del turismo de temporada han hecho que este foco bascule hacia el extremo inferior de la misma calle, precisamente donde se encuentra la plaza Gabriel Miró, y las calles que la circundan.

Uno de los primeros en apostar por esta zona fue el venezolano Andoni Goicoechea, que decidió abrir su segundo local de Goiko Grill en la capital alicantina (el primero, precisamente, abrió en mayo de 2017 en Pablo Iglesias, en el entorno del Mercado) en la calle Manero Mollà, cerca ya de la plaza. El segundo local de la cadena de origen venezolano, que acaba de vender el 80% de la empresa al fondo de Louis Vuitton tras crecer exponencialmente en dos años, lleva abierto nueve meses, y se ha convertido en una referencia en la zona con sus hamburguesas gourmet.

Poco después llegó la segunda gran apertura en la zona, el restaurante de tapas selectas Manero, a solo unos metros, que abría sus puertas a comienzos de este año. La nueva propuesta del Grupo El Portal complementa la del restaurante original, precisamente situado en la esquina de la calle con la plaza del Portal de Elche, y que ha actuado como tractor para concentrar la nueva oferta gastronómica del centro a su alrededor. 

La calle San Francisco, que desemboca en la misma plaza y atraviesa también Castaños, con un trazado paralelo al de Manero Mollà, ha registrado recientemente también nuevas aperturas. Con una oferta bastante concentrada desde hace años gracias al plan de revitalización de la zona (sobre todo en el tramo más próximo al Portal de Elche), el bajo comercial del número 15 se acaba de convertir recientemente en un restaurante de pasta fresca con opción 'take aeay', Sumisura. Sin abandonar la zona, en el cruce de Antonio Galdo Chápuli con San Francisco, brilla como referente de los gastrobares de la zona el Alma de Barra de Ferrán Arnau, que cumple un año de vida.

La propia plaza Gabriel Miró, donde siguen manteniendo el pabellón de la oferta local algunos clásicos como Los Mejillones o el más reciente Plaza Canalla, acaba de registrar (a principios de junio) el renacimiento del antiguo Café del Sol como Café Miró, con una decoración más moderna y minimalista y una carta renovada con las influencias italianas, obvias, de su nuevo equipo. Huelga decir que la oferta se completa con los tres locales que el Grupo Murri tiene abiertos en los bajos de la torre Edificia, sede de Deloitte: Terre, Murri y Abarrote encarnan la oferta de alta cocina en la zona.