ALICANTE, (EFE). Las camareras de piso de Benidorm, las denominadas 'kellys', se han concentrado hoy a las puertas del Ayuntamiento de Benidorm para denunciar la precaria situación de su trabajo, empeorada aún más a causa de la pandemia.
Han reclamado que los ERTE por fuerza mayor no bajen del 70% y que se mantengan "hasta la nueva activación del sector", pero también "que las empresas abiertas respeten los horarios, días libres y derechos laborales, además de no abusar de los ERTE parciales".
Mientras se desarrollaba la manifestación de las asociaciones turísticas de la ciudad, las camareras de piso han puesto de manifiesto que algunas cadenas hoteleras no incluyeron en los ERTE por fuerza mayor a las camareras fijas discontinuas y que estas se vieron obligadas a denunciar a la empresa.
De igual modo han señalado que este verano su carga de trabajo "no ha disminuido y han vuelto a hacer horas extra". Por ello han acusado de "falta de ética" tanto a los políticos como a los empresarios "que no cumplen".