Foto: RAFA MOLINA.BENIDORM. El Ayuntamiento de Benidorm rebajará el tipo impositivo del IBI en 0,12 puntos hasta situarlo en el 0,670. La propuesta del PP fue aprobada por toda la corporación en el pleno, pero a regañadientes. Tanto el PSOE como Cs consideraban que la reducción era electoralista e insuficiente, señalando que habría una media de seis euros de ahorro por vivienda. Sin embargo, la concejal de Hacienda, Aida García Mayor, explicaba que era lo que se podía permitir el Consistorio para 2022.
Así, la edil popular indicaba que la reducción del IBI se hacía “con todas las cautelas que permitan seguir con el cumplimiento de las medidas de control de gasto y con el convencimiento de llevar a cabo una reducción de la carga fiscal durante los próximos años sin perjudicar los servicios municipales y las inversiones”.
Por su parte, el PSOE sembró la discordia presentando una enmienda a la propuesta en la que reclamaba que el tipo impositivo se situara en 0,500. Al margen de esto, el portavoz socialista, Rubén Martínez, remarcó durante su intervención que se podría haber consensuado la cifra en una junta de portavoces para que el IBI bajara más de lo que quería el PP y que, según el líder del PSOE local, se merece el pueblo de Benidorm después de estos dos años "tan malos". Por ello, pidieron al gobierno local que apoyaran la enmienda ya que es la única forma de que salga adelante puesto que el PP tiene mayoría en el pleno.
Sin embargo, la edil de Hacienda afirmó que la propuesta del PSOE era "poco rigurosa y carece de objetividad". Así, García Mayor sacó en el debate un informe de Tesorería en el que el técnico municipal cifraba en 9,5 millones de euros los que dejaría de recaudar por este concepto la ciudad con la rebaja planteada por el PSOE. Un montante que supone el 10% de los ingresos de las arcas municipales. Además, a pesar de que advierte que el 0,500 es legal, mantienen que es imprudente por la incertidumbre en los ingresos por la pandemia. Todo ello si la enmienda no va acompañada de medidas de compromiso en la restricción o contención del gasto "a los efectos de asegurar el equilibrio presupuestario".
Con todo, no recomienda la aplicación de esa bajada en la forma en la que está redactada por su impacto en la estabilidad presupuestaria teniendo en cuenta que además el municipio tiene proyectos con financiación afectada para el 2022. Y entre otras consideraciones, indica que para la reducción "de tanto calado" en los ingresos, se haga de forma más gradual para poder ir analizando los datos y la situación económica financiera de forma periódica. Finalmente, la enmienda del PSOE la votaron en contra los 13 ediles del PP, frente al apoyo de la oposición: 12 concejales.
Balastegui y Martínez en una imagen de archivo. Fotos: RAFA MOLINA.Durante su discurso, García Mayor afirmó que el planteamiento de Martínez no incidía en mejorar la vida de los que menos tienen, sino en las que disponen más propiedades y más grandes, "vivan o no aquí", sentenció: "Lo que se pueda bajar, se bajará".
Por su parte, Martínez recordó que el Consistorio en 2020 tuvo un ahorro de 10 millones de euros, lo que para su grupo municipal es "una vergüenza" porque se tendría que haber destinado a ayudas a la ciudadanía por las consecuencias de la pandemia. Además, considera que esto es un ejemplo de que se le ha cobrado a los vecinos de la localidad más impuestos de los que deberían "en el peor año de Benidorm". En este sentido, señaló que lo que quieren es que les "sobre para gastarlo el año que viene en obras". "Se van a esperar al año siguiente para bajar los impuestos?", reflexionó el portavoz del PSOE. Por su parte, la edil de Hacienda recordó que hasta finales de año no se suspendieron las reglas fiscales que no permitían gastar más del 20% del remanente en estos asuntos.
Con el mismo tenor se pronunció el portavoz de Ciudadanos, Juan Balastegui, que recordó que en 2019 le rechazaron una propuesta en la que pedían que se comprometieran a bajar los impuestos cuando se cancelara el Plan de Ajuste. "Dos años después traen una rebaja que es insignificante para nosotros", decía el de la formación naranja. "No se si la reducción va a solucionar los problemas a los ciudadanos de Benidorm, lo veo más como una estrategia electoralista", manifestó Balastegui que recordó que para aplicar el Plan de Ajuste para rescatar las arcas municipales y rebajar la deuda, se "tuvieron que subir mucho las tasas e impuestos municipales. Hay que devolver a los ciudadanos el esfuerzo que han hecho". Por último, espetó que no estaba de acuerdo con que no se pudiera bajar más el IBI, "pero no quieren quitar dinero de obras".
La propuesta salió a favor con los votos de toda la corporación, como también ocurrió con las otras dos mociones relativas a tasas e impuestos: las modificaciones de las Ordenanzas Fiscales número 3, reguladora del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica, y la número 20, reguladora de la tasa por ocupación del dominio público local. La primera es una reducción de una media de 0,3 puntos de coeficiente, lo que implicará “una disminución del 47% en los recibos de ciclomotores y motos de pequeño calibre, y entre el 18,75% y el 23,52% en los recibos de la gran mayoría de turismos”, precisó Aida García. La segunda servirá para ampliar hasta el 31 de diciembre de 2022 la suspensión de la tasa por ocupación de mesas y sillas en la vía pública.
