El experto explica cómo la renta fija puede asegurarse buenos rentabilidades ante una relajación de las políticas monetarias de los bancos centrales
MADRID. Cuando los bancos centrales recortan los tipos de interés, la deuda de alta calidad puede ofrecer unos sólidos resultados gracias a dos fuerzas positivas:
Básicamente al invertir en un momento cercano al pico del ciclo de subidas de tipos, los inversores de renta fija pueden asegurarse unos niveles atractivos de rendimiento, lo que suele impulsar una sólida rentabilidad en los años siguientes.
Por el contrario, los recortes de tipos son negativos para las inversiones en instrumentos similares al efectivo. Pensemos en un inversor que pueda acceder actualmente a un depósito a tres meses por un 4% anual. Como el mercado descuenta los futuros recortes de tipos de los bancos centrales, lo más probable es que el tipo de interés de este depósito disminuya; basándonos en ciclos anteriores, el 4% inicial podría acabar convirtiéndose en un 1,8% anual. La rentabilidad obtenida por el inversor por un depósito a plazo a lo largo de varios años será muy inferior a la que hubiera previsto en un principio.
Haran Karunakaran es director de Inversiones de Capital Group