ALICANTE. La controversia suscitada en torno al disparo de las mascletàs en la Plaza de Luceros suma un nuevo episodio: el archivo de la denuncia presentada por la Plataforma Salvem el Nostre Patrimoni para que se dilucidase si la autorización para el desarrollo del concurso pirotécnico puede suponer un delito contra el patrimonio. Fuentes de la Fiscalía consultadas por Alicante Plaza han confirmado este jueves que el fiscal encargado de analizar la documentación aportada por Salvem el Nostre Patrimoni, Juan Carlos Carranza, ha resuelto cerrar las averiguaciones previas sobre el asunto al concluir que no existiría base suficiente de la que se pudiese desprender la comisión del supuesto delito apuntado por la plataforma.
De este modo, se descarta la posibilidad de incoar un procedimiento penal contra los dirigentes públicos señalados en la denuncia del colectivo, en la que se citaba al alcalde, Luis Barcala, y a los ediles de Fiestas y Cultura, Manuel Jiménez y Antonio Manresa, respectivamente. Fuentes de la Plataforma explicaron a finales de mayo, al registrar su denuncia, que -mediante su presentación- se trataba de "evitar la posible comisión de delitos contra el Patrimonio Histórico (aquitectónico) artículos 321, 322 y siguientes del Código Penal", además de otros posibles delito "contra el urbanismo, artículos 319 y siguientes; también el de prevaricación, artículo 404 y siguientes".
De igual modo, en la denuncia se solicitaba a la Fiscalía "que incoe procedimiento jurisdiccional penal que procedan para el cumplimiento de la Ley de Patrimonio Cultural Valenciano" y que se suspendiesen "las celebraciones de los actos de explosión de las mascletàs en la plaza de Luceros, declarada Bien de Relevancia Local, por la misma corporación, e incluida en el Catálogo General de Protección de la Ciudad, 2020", según explicaron entonces portavoces del colectivo, a través de un comunicado.
La propia Plataforma amplío su escrito con nueva documentación adicional en la que aportaba el "dictamen técnico elaborado por Salvador Ivorra, desde la UA, a demanda del propio consistorio en los años 2016 y 2017", según explicaron, igualmente, portavoces del mismo colectivo. Entonces, se argumentó que en ese informe, fechado en 2017, "se concluye respecto a los riesgos de los estallidos de pólvora en las proximidades del monumento que 'los niveles de vibración son perjudiciales para conservar la integridad estructural de la misma'". Sin embargo, esa ampliación de documentación tampoco habría tenido acogida por parte de la Fiscalía.
Sea como fuere, el desenlace del concurso pirotécnico de las fiestas de San Juan sigue pendiente del escrutinio de la justicia, a partir de otra acción paralela planteada igualmente por Salvem el Nostre Patrimoni. En este caso, se trata de un contencioso presentado frente a las bases reguladoras del concurso pirotécnico aprobadas por el Ayuntamiento para el desarrollo de los disparos en la emblemática plaza.
En ese contencioso, que se dirime ante el Juzgado de lo Contencioso número 1, la Plataforma incide en la misma motivación: la necesidad de que se revierta esa autorización con el propósito de evitar que pueda producirse un delito contra el patrimonio como consecuencia del deterioro que las mascletàs pueden generar sobre la fuente de Bañuls, según argumenta el colectivo.
El contencioso del colectivo se dirige frente a las bases del concurso pirotécnico con la pretensión de que queden anuladas para evitar daños sobre el patrimonio
Dicho recurso quedó registrado el 6 de junio, acompañado de la solicitud de una medida cautelarísima inaudita parte (sin atender a alegaciones de la parte demandada) con el fin de que se acordase la suspensión de las mascletàs hasta que se resolviese el fondo del asunto. No obstante, en un auto fechado el día 7, el titular del juzgado deniega las medidas cautelarísimas solicitadas al entender que no concurren los requisitos de especial urgencia exigidos para la adopción de tales medidas cautelarísimas. En esta línea, apunta que las bases del concurso se aprobaron el 19 de mayo y que, sin embargo, la Plataforma recurrente no presentó su contencioso hasta 18 días después.
De este modo, sin entrar en el fondo del asunto, el juez acuerda reconducir el procedimiento como una solicitud de medidas cautelares ordinaria, lo que permite recabar las alegaciones de la parte demandada, en este caso el Ayuntamiento. Todo, al margen del escrito de oposición que la Plataforma ya ha registrado este mismo jueves frente a la denegación de su medida cautelarísima, según han concretado fuentes del colectivo.
Entre tanto, ese auto concede un plazo de 10 días al Ayuntamiento para que se pronuncie al respecto de la petición de suspensión cautelar de los disparos con la formulación de las alegaciones que considere oportunas. Después, será el juez el que dictará una nueva resolución en la que aceptará la suspensión cautelar de los disparos o la denegará.
Así lo ha admitido el alcalde, Luis Barcala, este mismo jueves, en una comparecencia pública posterior al acto de presentación de la revista Festa de Fogueres, en la que ha asegurado que los Servicios Jurídicos municipales estaban trabajando en la elaboración de esas alegaciones. En todo caso, ha recalcado que en ese auto no se conmina al Ayuntamiento a concretar "medidas de protección" adicionales sobre la Plaza de Luceros. "Se había solicitado una medida cautelarísima y una medida cautelar, como alternativa; lo que ha hecho el juzgado es desestimar la cautelarísima y se nos ha dado un plazo de diez días para presentar alegaciones" respecto a su transformación en medida cautelar, ha explicado. "Estamos preparando esas alegaciones y el juzgado resolverá en los próximos días sobre si se procede el disparo de las mascletàs en Luceros", ha incidido.
De igual modo, ha señalado que la Plataforma "tiene el derecho" de presentar las acciones que considere oportuno y, además, ya ha anticipado que la denuncia presentada en Fiscalía por el mismo colectivo había quedado archivada. "El Ayuntamiento va a defender su postura; y quiero dejar claro que el juzgado no exige medidas de protección", ha enfatizado. "Estamos en una pieza de medidas cautelares en la que se dilucida si se suspende o no el disparo de las mascletàs; luego el contencioso tiene un fondo que se verá con el tiempo, pero el juzgado no nos requiere absolutamente nada", ha dicho.
Barcala insiste en mantener la plaza como lugar de los disparos y vuelve a descartar la existencia de daños, por lo que avanza que se responderá a Cultura que las medidas de protección sobre la fuente son las ya previstas
También se ha referido al requerimiento del Servicio Territorial de Cultura para que el Ayuntamiento remitiese un informe con medidas que reforzasen la protección del monumento. En este sentido, ha apuntado que, en ese requerimiento también "se instaba a buscar otro emplazamiento para las mascletàs dando por supuesto una serie de cuestiones como las reclamaciones que plantea Salvem el Nostre Patrimoni". Así, ha considerado que "se prejuzgaba una serie de cuestiones en la que no estábamos en absoluto de acuerdo y vamos a contestar a ese requerimiento de la conselleria pero hay una cuestión que tiene que estar muy clara: que la premisa de la que se parte, no solo no es cierta, sino que está sin acreditar, y que se prejuzga y se están dando por supuesto demasiadas cosas".
De nuevo, ha recalcado que "vamos a defender a capa y espada que las mascletàs se sigan tirando en Luceros", aunque ha admitido que será el juzgado el que decidirá. "Si accede a conceder la medida cautelar, nos habremos quedado sin mascletàs, y si no se admite, se dispararán desde Luceros; esa es la disyuntiva en la que estamos", ha dicho. "Con razón o sin razón hay quien ha instado, como una especie de pulso de unos pocos contra la ciudad y contra la fiesta, y la razón no es la defensa del patrimonio, las razones son otras, pero se han empeñado en que no se disparen en Luceros", ha señalado. Con todo, no ha concretado a qué tipo de razones se refería. Por último, ha recalcado que, en la respuesta que se prevé remitir a Cultura, se detallará que las medidas de protección "eran las previstas y son las que se van a mantener".