Al PP se le está haciendo largo llegar a la sesión de investidura de Núñez Feijóo y a Pedro Sánchez se le enquista la respuesta en su propio partido, aunque en silencio sigue negociando la futurible amnistía para los independentistas y que le apoyen en su propia investidura.
Castillo de naipes con sobreactuación . Y es que todo está tan hilvanado con alfileres que cualquier movimiento puede hacer cambiar la situación y derrumbar las cartas con las que se está jugando. Entre los errores de estrategia y puesta en escena del PP y las declaraciones más o menos críticas con la apuesta de Sánchez, a día de hoy no podemos decir a ciencia cierta qué es lo que va a pasar. Incluso lo de la repetición electoral ya se utiliza como baza por el propio PSOE, dicen que para acobardar sobre todo a Junts y que no exija tantas componendas futuribles como la unilateridad y el referéndum. Sobreactúan todos por exceso y por defecto. A Núñez Feijóo parece que por momentos le marca la agenda el ex presidente del Gobierno, José María Aznar, y lanza su concentración en Madrid, sorprendentemente dos días antes de su investidura. En el PSOE, Pedro Sánchez mantiene un curioso silencio y deja hacer a sus negociadores, que no sabemos de verdad quienes son. Disfruta viendo el desconcierto popular. Pero es que además a su izquierda, su vicepresidenta y líder de Sumar, Yolanda Díaz, también sobreactúa visitando a Puigdemont y asegurando que tienen líneas abiertas de negociación. Hasta el PP ha tenido contactos con Junst aunque no le guste reconocerlo.
El Congreso será una torre de Babel. Las exigencias independentistas provocan que más de uno haga piruetas. Es el caso de la cooficialidad de las lenguas en el Congreso de los diputados. De manera exprés, y casi sin pinganillos y traductores, hete aquí que la semana que viene ya escucharemos a sus señorías valencianas, catalanas, gallegas, vascas y de lenguas no cooficiales como el bable, el aranés y el aragonés hablando en sus lenguas vernáculas. En este último caso, los diputados afectados tendrán que recortar sus exposiciones. Las tendrán que partir en dos versiones: castellano y lengua autóctona. Está bien, pero cuando se hace bien. En el Senado se inició la tramitación del uso de las lenguas cooficiales en 2007 y no ha entrado en vigor su uso hasta 2021. En la cámara alta trabajan a tiempo parcial 45 traductores. En el Congreso casi es un visto y no visto. Apremian nacionalistas e independentistas y aunque falten pinganillos habrá lenguas ya. El informe de los letrados de la cámara es claro. Se necesita tiempo para poner en marcha el sistema con infraestructura técnica y los necesarios traductores. De momento se tomarán prestados del Senado. Las exigencias de los posibles socios de investidura de Sánchez tienen estas urgencias. Otra cosa será lo que ocurra en Europa.
Recordemos que el día de la constitución de las Cortes, una hora antes de iniciarse la sesión, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares presentó en el registro del Parlamento Europeo la solicitud para utilizar las lenguas cooficiales en las instituciones europeas. Sabido el acontecimiento, Junts y ERC dieron el plácet a Francina Armengol para ser la nueva presidenta del Congreso. Por no ser agoreros con la cuestión, Suecia, Hungría, Alemania y Eslovaquia han mostrado sus reticencias al asunto. Se necesita el acuerdo de los 27 socios europeos y por hacer memoria, recordemos también que Irlanda pidió en 2005 la utilización del Gaélico y la tramitación no se hizo efectiva hasta el año pasado. O sea, que se necesita tiempo
PSOE: Pedro Sánchez missing y a lo suyo. La idea desde Ferraz es ver como Núñez Feijóo se cuece en su salsa, consideran que está derrotado y en manos del antiguo PP. Pero dime lo que tienes que te diré de lo que careces. En el PSOE, resulta que también su vieja guardia le está enmendando la plana con las concesiones a los independentistas. Felipe González, Alfonso Guerra y demás ex, le afean de manera muy crítica esa cercanía con Puigdemont y compañía. Pero es que ahora ha decidido después de unos días en silencio volver a la carga. Este fin de semana estará en Galicia y el siguiente en Barcelona contraprogramando a Núñez Feijóo con su concentración, asistiendo a la fiesta de la rosa del PSC en Cataluña. Y como las negociaciones van como van, hasta le puede salir la investidura. ERC apremiado por Junts se conforma con un compromiso por escrito y un calendario para la amnistía. O sea, pelillos a la mar y apoyo a la investidura. Otra cosa será lo que diga Puigdemont. De momento está muy enfadado con los jueces y el Estado Español por condenar a su ex Conseller Miguel Buch que le puso un escolta de los Mossos cuando huyó de España.
PP: Alberto Núñez Feijóo tiene un agujero en Génova. Y no sabemos si es por iniciativa propia o por torpeza de sus fontaneros. Si les dices a tus líderes autonómicos que vas a movilizar a la gente y no lo publicitas y después das pábulo a que Díaz Ayuso apoye la concentración en Barcelona de Sociedad Civil Catalana y además José María Aznar pide esa movilización social, resulta que vas y ya anuncias a remolque que convocas una concentración contra la amnistía. Da la sensación de que no controlan el relato y dan argumentos a sus contrarios para que le zurren la badana. Otra cosa es la valoración de dicha convocatoria a tan solo dos días de la celebración de tu debate de investidura. ¿Has quitado fuerza a tu defensa como candidato? ¿Y si pinchas en la cita, qué pasa? Y mientras tu socio natural, Vox, mal que te pese y no quieras saber nada de él, se apunta a la manifestación de Barcelona el 8 de octubre.
Vox: Santiago Abascal vuelve a desaparecer. Y deja hacer a Feijóo y sus contrasentidos. A Abascal también le gusta el silencio. Solo aparece cuando le interesa y para dejar en evidencia no solo a Sánchez, que es lo suyo, sino también al propio líder popular. En Vox, mientras se dedican a la gestión. Consiguieron su pica en Flandes y ya gobiernan en coalición con el PP, nada menos que en cinco autonomías. Marcan su terreno con su locuacidad en asuntos mediáticos y simbólicos para ellos. Se desmarcan de los mensajes del PP que en muchas ocasiones tienen que marcar la línea divisoria. Su compromiso con Feijóo parece claro, aunque a veces haga dudar a los propios populares.
Sumar: Yolanda Díaz on fire Se siente la negociadora fundamental del Gobierno, incluido su primus inter pares, Pedro Sánchez. Si hay que ir a Bruselas a sonreír con Puigdemont se va. Insiste en sus dotes negociadoras. Y mientras se afana en controlar su heterogéneo grupo parlamentario de Sumar. Evidentemente Podemos no tiene opciones, otra cosa será su reacción y si se deciden a hacerle la vida imposible a su ahora lideresa, Díaz. De momento manda o eso parece entre sus compañeros y adheridos. Muchos rememoran a Pablo Iglesias, pero su tiempo ya pasó.
Alberto Núñez Feijóo, presidente del PP candidato a la investidura: “Es mi obligación intentar la investidura porque estoy al servicio de los españoles. Prefiero pagar el precio de un no a un sí al desgobierno. Quiero mirar a los ojos a los ciudadanos desde la oposición, a bajar la cabeza” ¡ Se le está haciendo eterno llegar a la investidura e intenta mantener el tipo!
José María Aznar, ex presidente del Gobierno: “Pedro Sánchez pone en riesgo la continuidad de España como nación. Ha llegado el momento de una gran movilización de la sociedad. ¡Basta ya!” ¡Le gusta marcar el relato!
Isabel Rodríguez, ministra Portavoz en funciones: “Aznar está pidiendo un alzamiento golpista” ¡Sobre actuación en el Gobierno!
Emiliano García Page, presidente de Castilla La Mancha: “El Gobierno cambia de un día para otro la posición sobre la amnistía. Esto es enormemente grave. Antes del 23 de julio, el presidente Sánchez y todos los ministros se han hartado de decirle a ERC que la amnistía no cabía en la Constitución. Alguien tiene que explicarlo” ¡El eterno disidente socialista que se queda en verso suelto!
Pere Aragonés, president de la Generalitat de Catalunya: “Estamos forzando al Gobierno del Estado. No solo queremos que asuma la amnistía. Tenemos que votar sobre la independencia, sino el conflicto seguirá” ¡Que nadie se llame a engaño!
Yolanda Díaz, líder de Sumar y vicepresidenta-ministra de Trabajo en funciones: “Feijóo tiene que comunicarle al Rey que no continua con la investidura” ¡Demasiada pro actividad!
Manuel Marchena, presidente de la Sala del Supremo encargada del procés: “No vivimos en una cápsula pero tengo una receta. Cuando tienes en la mesa un asunto mediático es el momento de dejar de escuchar tertulias y poner los 40 Principales o Radiolé” ¡Estrategia de distracción para que no te afecte!