VALÈNCIA (EFE). La Comisión Europea (CE) dio este miércoles luz verde a una ayuda española de 30 millones de euros incluida en el plan de recuperación del país con la que se busca eliminar las barreras a la interoperabilidad en el transporte ferroviario de mercancías.
Bruselas precisó en un comunicado que las ayudas son “necesarias y proporcionadas para mejorar la interoperabilidad y promover el uso del transporte ferroviario, que es menos contaminante que el transporte por carretera y reduce la congestión del tráfico”.
“La medida, por tanto, será beneficiosa tanto para el medioambiente como para la movilidad”, expuso el Ejecutivo comunitario.
Agregó que la ayuda tendrá un efecto “incentivador”, ya que los beneficiarios no llevarían a cabo las inversiones sin el respaldo público.
Así, la Comisión concluyó que la medida contribuirá a la coordinación del transporte y facilitará el cambio del transporte de mercancías de la carretera al ferrocarril, “en línea con los objetivos políticos de la UE, sin distorsionar indebidamente la competencia en el mercado único”.
Las ayudas se financiarán mediante el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, la piedra angular del fondo de recuperación comunitario, después de que la CE y los Estados miembros ya dieran en el pasado su visto bueno al plan de recuperación español.
El apoyo público de 30 millones de euros tomará la forma de subvenciones directas para financiar la mejora de los equipos de a bordo del Sistema Europeo de Gestión del Tráfico Ferroviario (ERTMS, por sus siglas en inglés).
Las subvenciones, igualmente, financiarán “otras medidas para eliminar las barreras a la interoperabilidad ferroviaria, como la instalación de sistemas de reducción de ruido y ejes de ancho variable en vagones de mercancías por ferrocarril, así como la adaptación de locomotoras a diferentes tensiones".
Bruselas insistió en que el objetivo del respaldo público es promover el cambio modal del transporte de mercancías de la carretera al ferrocarril, “que es un medio de transporte más verde”, y resaltó que está “en línea” con el plan de recuperación español, la estrategia de movilidad sostenible e inteligente y el Pacto Verde Europeo.
La Comisión evalúa todas las ayudas estatales que los países proporcionan en el marco del fondo de recuperación comunitario.