VALÈNCIA (EP). La Asociación de Apartamentos Turísticos de la Comunitat Valenciana (APTUR CV) reclama que sean los ayuntamientos los que asuman el cobro de "la mal llamada tasa turística" y alerta que la implantación de este impuesto aflorará los alojamientos ilegales.
La semana pasada, el pleno de Les Corts dio luz verde al inicio de la tramitación de la ley de esta tasa consensuada entre los socios del gobierno valenciano (PSPV-Compromís-UP). Un impuesto que, en caso de aprobarse, será de carácter voluntario a aplicar por cada ayuntamiento y no comenzará a cobrarse hasta 2024.
En un comunicado, el presidente de la patronal de las viviendas turísticas regladas de la Comunitat, Miguel Ángel Sotillos, defiende que las empresas o particulares del sector no pueden cobrar un impuesto público y hacerse cargo de la transferencia a la administración.
Por contra, a su juicio, el ayuntamiento que quiera "imponer" ese pago debería hacerse cargo de su gestión. "Si nos obligan a ser sus agentes tributarios, nosotros deberíamos exigir las condiciones de ese servicio", recalca.
Advierte además que el sector de las viviendas turísticas regladas se sumará a cualquier iniciativa en contra de la tasa turística: "No tiene sentido obligarnos a que cobremos un nuevo impuesto a los turistas porque nos supondrá gastos de adaptación y una sobrecarga de trabajo que solo soportaremos los alojamientos reglados, lo que fomentará la proliferación de alojamientos ilegales".
APTUR CV, que representa al 55% de la oferta alojativa de la Comunitat con 85.000 apartamentos y pisos turísticos reglados de más de 250.000 plazas, fue una de las primeras asociaciones en adherirse a la plataforma 'No a la tasa turística' para mostrar su rechazo a la propuesta acordada por los grupos políticos del gobierno valenciano (PSPV, Compromís y UP).