Mireia Estepa, alcaldesa de Cocentaina. Foto Pau SellésCOCENTAINA. Este jueves arranca uno de los eventos más multitudinarios de la Comunitat Valenciana, la 672 edición de la Fira de Cocentaina. La alcaldesa del la villa condal, Mireia Estepa, atiende a Alicante Plaza y habla de las novedades del certamen, que acaba de ser declarada Bien de Interés Cultural por la Generalitat Valenciana. Este años, además, hay una apuesta por la gastronomía, con 18 demostraciones culinarias desde cocina internacional pasando por la cocina de autor, tradicional, repostería, café, cerveza artesana, licores y cocteleria, entre otras.
-¿Qué supone para la Fira ser Bien de Interés Cultural?
-La principal novedad es que ahora tendremos acceso a unas ayudas de ámbito estatal. Además, de garantiza la protección de la Fira de Tots tal y como la conocemos actualmente y se incorpora un atractivo turístico más. Desde luego, ha sido la noticia más esperada y lo que redondea esta edición. Es una grandísima alegría.
-¿Qué objetivo cualitativo persigue la Fira, pues de público es un evento que va sobrado?
-El año pasado llegamos al medio millón de visitantes. Este año, las cifras serán como mínimo las mismas, al celebrarse en un puente y si hace buen tiempo. Son dos elementos a tener siempre en cuenta para el éxito de cada edición. Esperamos buenos resultados. No es fácil poner novedades cada año. Hemos visitados otros certámenes y hemos estado estudiando cómo se mueven los eventos que se realizan en IFA o IFEMA, cuáles son las inquietudes sociales de sus visitantes y de ahí vamos sacando ideas, y nos quedamos con aquellas que pueden mejorar la Fira.
-El año pasado se incorporó el sector de Innovación. ¿Repite? ¿Ha sido una buena experiencia?
-Sí, se mantiene, al igual que el espacio para los deportes outdoor. Estos espacios está ya consolidados.
-¿Este año parece que la apuesta de la Fira es la gastronomía?
-Es uno de los grandes atractivos de la Fira. Este año hemos incorporado un espectáculo unido a la cocina. Habrá una serie de showcookings donde la gente podrá disfrutar de cómo se cocina en vivo.
-Además, este año el chef Kike Moya tiene un papel muy destacado...
-Es una persona muy reconocida dentro del sector gastronómico. Su restaurante, L'Escaleta, tiene dos estrellas Michelin y tres soles Repsol. Moya será el encargado de leer el privilegio de la Fira como reconocimiento de todo el pueblo por su trayectoria.
-¿Se ha notado la recuperación económica? ¿El público gasta más?
-Desde hace dos años, hemos detectado que las cifras son muy buenas. Nos fijamos muchos en el número de ventas del automóvil y la maquinaria agrícola porque son los productos más caros de la Fira. El sector de los concesionarios está muy satisfecho por las ventas de la Fira porque aquí se cierran los objetivos de venta de todo el año. Es un buen reclamo comercial.
