ALICANTE (EP). La Universidad de Alicante (UA) se ha convertido en la primera universidad en desarrollar el primer laboratorio de tecnología Blockchain a través del Instituto de Economía Internacional. Así, el primer Blockchain Lab de una universidad pública española es el BAES (Blockchain Aplicado a las Administraciones Públicas y las Empresas).
La plantilla está formada por un equipo multidisciplinar de juristas, economistas, informáticos, entre otros; y, además, cuenta con científicos del CERN-Laboratorio Europeo de Física de Partículas.
En un comunicado, la institución académica ha destacado que la tecnología Blockchain supone una enorme revolución económica, social y tecnológica que ya tiene su grupo de investigación en la UA.
El objetivo de BAES, según señala su directora y profesora de Derecho Mercantil de la UA, Carmen Pastor, es desarrollar esta tecnología en el ámbito de la administración pública y de la empresa privada y alcanzar un estándar de Blockchain europea. "Entendemos que es una herramienta clave para aumentar la calidad de vida y para la consolidación de un mercado único garantizando la transparencia", destaca.
Según la directora, "desde BAES queremos contribuir a la digitalización administrativa y empresarial para conseguir ser referentes nacionales e internacionales -Sur Europa y América Latina- de una de las tecnologías clave en la nueva economía del conocimiento". Así, el Blockchain Lab de la UA trabaja junto a AlicanTEC, Asociación para la Promoción y el Impulso de la Tecnología y la Sociedad del Conocimiento en la provincia.
Blockchain o cadena de bloques -en castellano-, permite realizar cualquier tipo de operación entre personas de todo el mundo de un modo seguro, transparente, en tiempo real, reduciendo costes, burocracia y sin necesidad de intermediarios, ha definido la UA.
Esta tecnología es como "un gran libro de registro" que se distribuye entre varios participantes, llamados nodos, que recogen todas las transacciones que se han ejecutado en la red. En concreto, es una red descentralizada, distribuida y sin jerarquías en la que cada usuario puede contestarse desde su dispositivo (PC, smartphone, tablet)
"Esto significa que para realizar, por ejemplo, un movimiento financiero o un voto electrónico no vamos a necesitar un tercero llamado banco o notario como hasta la fecha. Y es que seguro que estos actores se van a adaptar a la nueva realidad, amén del problema de gobernanza y potenciales riesgos que, en el ámbito de la representación democrática, puedan surgir. Gracias al Blockchain, cada movimiento es registrado y comprobable por todos los participantes y difícilmente corruptible porque es imposible manipular a toda la red de nodos", explica la profesora de la UA.
En su origen, Blockchain se planteó como infraestructura básica para la criptomoneda tipo Bitcoin, pero contempla miles de aplicaciones. "Esta tecnología presenta un gran potencial con opciones infinitas para la administración pública y las empresas independientemente de su tamaño. Todo lo que se pueda registrar, liquidar y compensar se puede hacer con Blockchain", afirma Pastor.
BAES, el Blockchain Lab de la Universidad de Alicante nacido a finales de 2017, cuenta con cuatro nodos operativos desde los que desarrolla numerosas pruebas para mejorar la eficiencia de los procesos de las administraciones públicas y empresas privadas. Surge con la misión de afrontar el estudio, análisis y desarrollo de esta nueva tecnología "ya que supone uno de los desafíos más exigentes de conocimiento en la actualidad", como indica Carmen Pastor. De hecho, acaban de publicar el libro colectivo Blockchain: aspectos tecnológicos, empresariales y legales.
Este grupo interuniversitario está formado por un equipo multidisciplinar de investigadores y profesionales juristas, economistas e informáticos y cuenta, incluso, con científicos del CERN-Laboratorio Europeo de Física de Partículas. Además de investigar las potencialidades del Blockchain, el Lab de la UA, apunta Carmen Pastor, ofrece formación a la carta y pone a disposición de administraciones y empresas asesoramiento para el acceso a esta tecnología emergente, así como la "certificación" en todos los aspectos técnicos, legales y organizativos que permiten su uso efectivo.